Cada vez más, tanto el cuidado como la decoración de los espacios, definen e impactan en la salud y el bienestar de toda la familia. No importa el tamaño de la casa o la distribución de los ambientes, siempre hay una manera de transformar los espacios y hacerlos más funcionales para el estilo de vida de cada persona.

Para decorar tu hogar, no es necesario desembolsar grandes cantidades de dinero ni que tires abajo paredes; con algunos tips y elementos clave, lograrás marcar una diferencia.

Primero, delimita los espacios

Para que el proceso sea exitoso, la primera parte consta de observar. Registra la cantidad de espacio que tienes disponible y cuál es el uso que pretendes darle, de acuerdo a las actividades familiares.

Por ejemplo, no tiene sentido tener una habitación enorme destinada a un comedor que no se utiliza casi nunca, si a la vez sientes que falta un espacio de escritorio o de sala de estar. Anímate a conectar con tus necesidades y la de tu grupo familiar para que los espacios se adapten a ustedes y no viceversa.

Unas buenas alfombras son una gran alternativa para que los espacios estén claramente definidos. Además, aportan calidez y confort. Son ideales para livings, habitaciones o salas de juego y tienen distintos diseños para todos los estilos.

También puedes delimitar espacios con maceteros y plantas, muebles ubicados de manera estratégica y puertas de vidrio para no afectar el ingreso de luz. 

Luego, define un estilo

Si bien es posible tener un hogar lleno de elementos eclécticos fusionados, lo ideal es que tus espacios logren una armonía visual y estética. La mejor manera de lograr esto es observar los elementos decorativos que ya tienes y tratar de identificar un patrón en común.

Así, podrás definir tus gustos y gama de colores preferida para cada espacio. Si estás en duda, puedes optar por tonos neutros y claros que aporten calma y sencillez a tu hogar.

Al momento de elegir la distribución de los muebles y demás elementos, intenta no sobrecargar los espacios para no perder la sensación de apertura y poder moverte con facilidad. 

Luz, luz y más luz

La luminosidad de los espacios de tu hogar puede marcar la diferencia. Tener buena luz natural o la dosis justa, hará que tus objetos resalten.

Trata de aprovechar los espacios luminosos al máximo, sobre todo para ubicar ahí plantas de interior. Dan vida a los espacios y son elementos decorativos de gran impacto. Para aquellos jardineros inexpertos, hay algunas que requieren cuidados mínimos y aportan energía y calidez.

Para espacios como habitaciones o lugares de descanso en los que prefieres tener absoluto control de la luz que ingresa, una alternativa interesante son las cortinas roller. Este tipo de cortinas tiene tela dúo o black out. Esta última bloquea toda la luz exterior para asegurarte un descanso sin interrupciones. La instalación es muy simple y el diseño es minimalista y se adapta a cualquier hogar.

Mezcla materiales y texturas

Los materiales y las texturas son elementos fundamentales a la hora de decorar un espacio. Aportan a la estética general y resultan prácticas para el uso cotidiano.

Lo mejor es optar por texturas suaves y agradables al tacto, que fomenten el descanso y la dispersión. La mezcla y la fusión de materiales y texturas le dará a los ambientes profundidad.

La combinación de telas es una excelente manera de darle dinamismo y estilo a tu hogar. Siempre intenta optar por materia prima de calidad que resulte práctica y funcional. Lo ideal es adecuar tu hogar para que consuma la menor energía posible y sea un lugar agradable durante todas las estaciones del año.

Otros materiales que se destacan para decoración de interiores son la madera, con sus múltiples variantes, y los elementos de vidrio y cristal. Los espejos y elementos reflectantes son ideales para que los espacios parezcan más grandes y luminosos.

Los almohadones, sillones, muebles e incluso elementos como los manteles son relevantes para que un espacio tenga estilo y armonía. 

Busca piezas de impacto

Una manera simple de dar un toque especial a los ambientes es con alguna pieza de impacto. Puedes jugar con los colores u optar por algún elemento decorativo que llame la atención, como una escultura o un mueble excéntrico.

También puedes elegir darle personalidad a un mueble común y corrientes. Por ejemplo, puedes retapizar un sillón de algún color llamativo o colgar un cuadro grande en una pared vacía. Con solo un tarro de pintura del color perfecto puedes transformar un ambiente.

Haz de tu espacio un lugar único

Por último, tu hogar es único en el mundo y debe reflejar tu personalidad. Busca elementos que cuenten parte de tu historia y agregalos a tus espacios. Obras de arte, fotografías y otras piezas decorativas son clave para aportar algo especial a tu hogar y hacerte sentir realmente en casa.

Decorar espacios es una tarea sumamente dinámica y puede verse modificada en el tiempo para aportar más tanto en fines prácticos como estéticos.