Nadie puede negarlo, desde hace tiempo la plancha abdominal se volvió el ejercicio de todos los ejercicios al ser la mejor alternativa para fortalecer el abdomen.

Los abdominales tradicionales, sino se hacen correctamente, pueden tensar el cuello y la espalda, provocando lesiones. Pero con una plancha correctamente ejecutada, esto no ocurre. Y es que una plancha no exige de la flexión de la espalda.

La clave está en lograr mantener por algunos segundos la posición de plancha. Si puedes aguantar 2 o 3 segundos, también puedes aguantar 9 o 10 y así sucesivamente hasta llegar al minuto. “Cuando consigues mantener una plancha ese tiempo, el dolor de espalda desaparece”, asegura el doctor Edward Philips, profesor de fisioterapia y rehabilitación de la Escuela de Medicina de Harvard.

¿Cuál es la explicación detrás del alivio del dolor? La respuesta es simple y alude al hecho de haber pasado por alto que tener un abdomen firme va de la mano de una espalda fuerte. Si los músculos del core se fortalecen, hay un mayor apoyo a la columna vertebral y así el cuerpo funciona de manera más estable.

Y los expertos de Harvard confirman que una de las consecuencias de un core sin ejercitar es precisamente el dolor de espalda. “Un core débil puede provocar muchos problemas. Entre ellos, una mala postura e, inevitablemente, dolor de cuello y hombros. Los dolores de rodillas y caderas pueden atribuirse también a un core débil. Pero el gran problema es el dolor de espalda. Los músculos de la espalda y el core estabilizan el cuerpo antes de cualquier movimiento. Si el core no tiene fuerza los músculos de su alrededor tienen que compensarlo y con el tiempo pueden sentir tensión y provocar dolor persistente“, explican.

Además, el beneficio más grande es precisamente el poco tiempo que requiere, y recomiendan empezar con planchas de entre 10 y 30 segundos. “Es preferible centrarse en hacer múltiples planchas en pequeñas cantidades de tiempo. Y a medida que progreses, alarga el tiempo de la plancha hasta uno o dos minutos, pero no más. Dos minutos de plancha se considera el máximo ya que pasado ese tiempo no se obtienen muchos más beneficios”, explica Eric L’Italien, fisioterapeuta de Harvard.

Ahora bien, para tonificar el abdomen se requiere algo más que solo planchas, como otros entrenamientos complementarios de fuerza y llevar una dieta ad hoc.