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Mañana comienza el Mundial de Fútbol en Qatar y medio mundo ver a los 32 países clasificados, disputarse la preciada copa. El país anfitrión ha sido cuestionado desde su anuncio y entre polémicas sobre los derechos humanos y un alto precio, el nombre de su emir pulula por el mundo. ¿Quién es Tamim Bin Hamad Al Thani?
Dicen que la imagen de Tamim está por todas partes. Desde pequeños locales de comida callejera, a hoteles y peluquerías, incluso en tiendas de recuerdo. El emir de Qatar es una figura omnipresente y a partir de este domingo será seguida de cerca por millones de espectadores.
Hace poco más de medio siglo, la familia Al Thani sobrevivía a la crisis. Pero el petróleo y el gas, lanzarían a este pequeño emirato a disputar dicho poder con sus poderosos vecinos Arabia Saudita, Irán e Irak.
En 1995, Hamad bin Khalifa le quitaría el poder a su padre en un Golpe de Estado, quien solía mantener un bajo perfil, ideal para sus vecinos. Con la llegada del nuevo emir las cosas se intensificaron, los objetivos eran opulentos y la pequeña península quería pelear con los grandes. Pero el nuevo regente abdicaría en 2013 a favor de su hijo Tamim bin Hamad Al Thani, actual emir y jefe de Estado del país, dejando dicha tarea a la nueva generación. Pero a esas alturas, el gas ya había cambiado muchas cosas.
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De pequeña península a potencia
A mediados de los 90, Qatar se asoció con empresas norteamericanas y japonesas para convertirse en el mayor exportador mundial de gas licuado (GNL) y explotar así las reservas del mar. Los dólares empezaron a fluir y los Al Thani planearon la expansión.
A finales del siglo pasado surgían nuevos símbolos del país, entre ellos, la cadena Al-Jazeera, la aerolínea Qatar Airways y Qatar Investment Authority, un fondo de inversión que cubre Europa, Asía y Estados Unidos.
Además, tiene acciones en la Bolsa de Londres, en las automotrices Volkswagen y Porsche, adquirió marcas emblemáticas como Harrods, Tiffany, Hollywood Miramax y participa en British Airways, los banco Barclays y Credit Suisse, entre muchas otras en el mundo.
Pero fue con el fútbol que los Al Thani expandieron aún más sus brazos. En 2005, Tamim fundó Qatar Sport Investiments y uno de sus primero movimientos fue comprar un club en crisis y donde actualmente juega Leo Messi: el Paris Saint-Germain. También invirtió en el Barcelona y su sueño es llevar a su país los Juegos Olímpicos.
En 2010 obtuvo la organización de este Mundial. Fue un proceso marcado por la poca transparencia, fuertes acusaciones de corrupción y donde hubo que cambiar hasta la fecha de inicio. Peleó con federaciones de países como Estados Unidos, Australia o Japón, pero Tamim siguió adelante y llevó el fútbol al desierto. Todo, con el fin de cumplir su plan Qatar National Vision 2030, hacia donde quiere llevar el posicionamiento de su país en el mundo.
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Un líder carismático
Los expertos aseguran que Tamim es un líder querido por los qataríes, sobre todo, debido al bloqueo que sufrió el país por parte de sus vecinos en 2017 y 2020, tan solo poco años después de asumir como jefe de Estado. Y el hecho de no aceptar ninguna demanda de parte de Arabia Saudita, Emiratos Árabes, Bahréin y Egipto hizo que su posición como líder se arraigara aún más tanto en Qatar como en la región.
Para ellos, representa una nueva generación, formada en el extranjero y que, por lo mismo, puede verse más amable ante el mundo occidental.
En lo personal
Tamim busca mostrarse ante el Occidente como un líder moderado, pero no puede ocultar su vida opulenta. Su familia es dueña de la residencia más cara del Reino Unido, y estiman que poseen más propiedades que la familia real británica en Londres.
El emir, tiene 42 años ytres esposas. Pero para verse como un líder occidetanlizado, las visitas de Estado las hace con la primera de ellas, Jawaher Bint Hamad. Además, en algunos viajes prefiere ir sin sus trajes tradicionales árabes.
La familia real qataría disfruta del verano en el Mediterráneo español. Y suele llegar hasta Mallorca con un numeroso séquito, autos de lujo y jet privado. Además de su lujoso yate, uno de los más caros del mundo.
Y si de relaciones se trata, Tamim tiene una muy buena con el expresidente argentino, Mauricio Macri. Es más, lo visitó en Buenos Aires en 2018, donde firmaron acuerdos sobre la supresión de visado diplomático, materia de educación, deporte y producción y empleo.
A partir de este domingo la familia real qatarí será el centro de atención. Algo que, al parecer, les gusta. Independiente de las polémicas sobre los derechos humanos que nublan el torneo deportivo.
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