Probablemente el nombre de David Leitch no le diga mucho. Pero si le digo que su oficio es el de director de cine y que en su currículum tiene a su haber la segunda parte de Deadpool, la última de la saga Rápido y Furioso que se estrenó en 2019, que dos años antes dirigió a Charlize Theron en Atomic Blonde, esa donde la ganadora del Oscar era una agente encubierta en plena guerra fría donde daba patadas a diestra y siniestra, y que por si fuera poco, y aunque no está en los créditos oficiales, fue el director de la primera John Wick, entonces entendemos mucho del tono y el ritmo que tiene Tren Bala, su última realización y el último estreno con Brad Pitt a la cabeza de todo. Cosa que, de por sí, ya es noticiosa.
Harta información para considerar con el fin de ponderar en su justa medida este verdadero divertimiento que lidera una de las principales estrellas de la constelación Hollywood. Y la historia nos lleva a Japón, donde todo es colorinche y con luces de neón, y donde vemos a nuestro Brad hablar por manos libres con una voz femenina, que le encomienda una misión, una conversación muy insólita y durante muchos ratos graciosa. Se supone que Brad, que para estos efectos será Ladybug, es un agente que trabaja para una organización secreta que desconocemos y que tiene por objetivo, hacerse de un maletín con un valioso motín que lo lleva un criminal mexicano, rol a cargo ni más ni menos que de Bad Bunny, dentro de un tren bala que se dirige a Tokio. El asunto es que si esto ya suena complejo, hay una serie de personajes dentro de este tren, que le harán la tarea difícil. Un par de historias cruzadas de venganzas, duelos con katanas, una serpiente venenosa y una botella de agua con esas drogas que te aturden.
Quizás sea de perogrullo declarar que en Tren Bala el ritmo es vertiginoso. Y es que la película no para ni en secuencias de acción ni -y acá lo mejor de todos- en situaciones de alta comedia. Por sobre cualquier cosa este es un filme divertidísimo, una comedia de acción hilarante, con un Brad Pitt totalmente entregado al juego y aportando grandes momentos. La película del director David Leitch, con su decorado ultra moderno cuyo tren parece ser la escenografía de cualquier publicidad de algún producto de alta gama, resulta ser una gran sorpresa. Porque ya sabemos que no porque una película sea protagonizada por Brad Pitt, y que cuente con un elenco que incluye a Michael Shannon, Bad Bunny, Aaron Taylor Johnson y con cameos de Sandra Bullock, Channing Tatum y Ryan Reynolds, asegura excelencia. Lo cierto es que el material que se nos da es honesto en su función de entretener y lo logra con creces.
Una película que es hábil en entregarte una serie de elementos que tendrán alguna incidencia en la historia. Llena de un humor absurdo y un tono farsesco que se agradece. Mucha bala, cuchillos, alta velocidad, enfrentamientos y risas en un tren en movimiento. Una gran alternativa para dejar el cerebro en remojo durante estos días donde se agradece tanto hacerlo al menos durante un rato. Tren Bala se estrena este jueves 4 de agosto en todos los cines del país.