Luego de convertirse en el retrato de la familia perfecta, todo parece indicar que Gisele Bündchen y Tom Brady están a solo pasos del divorcio. Y la noticia de que ambos han conseguido abogados para la separación llega a confirmarlo.
Recientemente se reveló que la pareja, que se casó en 2009, se encontraba viviendo separada hace más de dos meses tras una fuerte pelea. Y aunque por algunas semanas pareció que podía existir una solución para el drama, al parecer no fue así.
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«En realidad, nunca pensé que esta discusión sería el final de ellos, pero parece que lo es», señaló una fuente cercana al matrimonio a Page Six. «No creo que haya ningún regreso ahora. Ambos tienen abogados y están analizando lo que implicará una división, quién se queda con qué y cuáles serán las finanzas».
El divorcio, según muchos aseguran, podría ser llevado a cabo en Florida, ya que ahí es donde más tiempo pasan. Y una de las principales prioridades sería dividir sus activos, que incluyen una cartera de propiedades de $26 millones de dólares.
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En cuanto a sus hijos Benjamín y Vivian Lake, las mismas fuentes cercanas al siete veces campeón del Super Bowl, y la supermodelo brasileña, aseguraron que debido a que ambos están muy involucrados con las vidas de sus hijos, compartirán la custodia una vez que el divorcio se lleve a cabo.
Si bien el motivo de la gran discusión no se ha dado a conocer, se especula que sería debido a que Gisele no estaba de acuerdo con que el mariscal de campo regresara a las canchas a 40 días de su supuesto retiro definitivo, que le permitiría a Brady a enfocarse por completo en su familia.