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Todo parece indicar que el príncipe George, el hijo mayor del príncipe William y Kate Middleton, está considerando seguir los pasos de su padre. Esto, luego de que visitara el prestigioso internado masculino.
George, de 9 años, fue visto durante esta semana junto a sus padres, los príncipes de Gales. En la visita, recorrieron el prestigioso Eton College, ubicado en Windsor, Inglaterra.
Yesterday, the Prince and Princess of Wales visited Eton college with Prince George ! 📚 🏫 👨🏫 pic.twitter.com/nGfyjszXuU
— Louis (@LouisStevenson9) June 22, 2023
Los príncipes y su hijo, fueron vistos hablando con dos miembros del personal del internado masculino, al que William comenzó a asistir en 1995, a los 13 años, y su hermano, el príncipe Harry, en 1998, a los 14.
La institución, aunque destaca por su historia cercana con la familia real británica, también ha sido lugar de estudios del actor Eddie Redmayne, y los ex primeros ministros británicos: Boris Johnson y David Cameron.
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Con un valor de 58.600 dólares al año, la institución solo acepta niños a partir de los 13 años. Y George, cumplirá el 10 este año, por lo que se cree que sus padres podrían estar intentando familiarizarlo con el colegio con anticipación.
El mayor del matrimonio, actualmente asiste junto a sus hermanos pequeños Charlotte y Louis, a la escuela Lambrook de Berkshire, que se centra en el medio ambiente y ofrece una gran variedad de disciplinas extracurriculares.
Por lo general, muchas de las tradiciones que realizan en la familia real se trata de decisiones que han sido tomadas durante años. Sin embargo, cuando se trata de Eton, es algo completamente nuevo en la historia familiar.
A diferencia de William y Harry, el abuelo de George, el rey Carlos III, asistió al internado escocés Gordonstoun, enviado por su padre, el príncipe Felipe, quien también asistió al colegio.
Sin embargo, según reveló el novelista William Boyd, Carlos “detestaba” su estancia ahí. E incluso, aseguro que el recién coronado monarca, describió el colegio como una “servidumbre penal”.
Llegado el momento, Carlos optó finalmente por no enviar a sus propios hijos a la escuela escocesa. Y George, ahora se convertiría en la segunda generación de la familia en romper la tradición y asistir a Eton.
