La serie se llamaba “Sex and the City” pero, curiosamente, su protagonista fue la única actriz que no apareció desnuda en algún capítulo. La razón es simple; en cada uno de sus trabajos Sarah Jessica Parker estipula por contrato que no hará escenas sin ropa. “No juzgo a la gente que lo hace. De hecho, es fantástico que la gente se sienta bien haciéndolo. Simplemente, yo no”, ha dicho.
Julia Roberts comparte esta mirada. En “Mujer bonita” hay escenas sugerentes -porque, claro, interpretaba a una prostituta- pero no hay momentos de sexo explícito. Es una decisión que la actriz ha mantenido a lo largo de su carrera. “Como madre de tres niños, siento que debe ser así”, dice.
Y Kristen Bell, quien interpreta a la desopilante Eleanor en “The Good Place”, ni siquiera lo ve como una posibilidad. “¡Yo no muestro mis cosas!”, dice. Y cuando se lo han ofrecido, tiene la respuesta precisa; “sigan soñando”.
La cantante y actriz Jessica Simpson también ha dicho que jamás se quitaría la ropa en una película; “Nunca haría un desnudo integral. No me importa lo oscuro o profundo que sea el personaje o si no opto al Oscar por no hacerlo. Simplemente, nunca lo haré”. Y punto.
¿Más actrices que establecen esta regla?
Blake Lively, una de las protagonistas de “Gossip Girl”; “Cuando veo desnudos en cualquier película, siempre me distraigo. Sé que, si estoy viendo una escena de sexo y alguien tiene el pecho al aire, es todo lo que voy a mirar. No creo que eso sea lo que quiero para mí”, dijo al Daily Mail.
Jessica Alba es otra que no hace desnudos y, en su caso, la razón es muy tierna; no quiere que sus abuelos le vean las pechugas. En tanto, Megan Fox es más dura en sus declaraciones; “Creo que esas cosas degradan a la mujer que está actuando”, ha dicho.