El pasado 8 de septiembre la monarca más longeva en la historia del Reino Unido dejaba el trono luego de 70 años. Aquel mismo día el príncipe Carlos asumía con rey Carlos III, y en sus primeros días el recuento no ha sido del todo positivo.
Lleva menos de una semana como rey y las polémicas ya son parte del nuevo camino de Carlos. Desde la preocupación por sus “dedos de salchicha” al video de su rabieta que se hizo viral.
En una ceremonia de firma el soberano británico reveló que sigue afectado por la muerte de la reina Isabel II. Y en algo tan mínimo como una firma, armó una tormenta en un vaso de agua.
Mientras firmaba unos documentos, el rey Carlos III se equivocó de fecha, poniendo 12 en vez de 13 de septiembre. Ante la corrección de uno de los presentes, se da cuenta que anteriormente había cometido el mismo error. La molestia continúa porque la pluma que utilizó se le “chorreó” en la mano, y se la pasa a la reina consorte Camila, descargándose por el impasse. “No puedo soportar esta maldita cosa. Lo que hacen, cada apestosa vez”, dice molesto. Y luego se le escucha seguir discutiendo al respecto mientras se retira.
Si creen que han tenido una pésima semana piensen en Carlos III 😕
— Risco (@jrisco) September 13, 2022
La polémica más reciente no incluye tinta pero sí a decenas de trabajadores enfurecido al ser despedidos de su ex casa residencial Clarence House.
Mientras fue príncipe de Gales, Carlos III vivió ahí junto a su esposa Camilla, la reina consorte, por décadas. Pero tras ascender al trono, luego de la muerte de la reina Isabel, ambos se trasladarán al Palacio de Buckingham.
Según el diario británico The Guardian, al rededor de 100 trabajadores de la antigua residencia oficial del rey recibieron cartas en las que se les informa de que sus servicios ya no serán requeridos y que se les ayudará a buscar nuevos empleos. Una noticia que, por lo demás, llega en medio del servicio religioso en honor a la reina en la catedral de St Giles en Edimburgo, este lunes.
“Todo el mundo está furioso, incluidos los secretarios privados y el equipo de mandos”, dijo a The Guardian una de las fuentes. “Todo el personal había estado trabajando muy duro desde la noche del jueves (cuando murió Isabel II) para encontrarse con esto… La gente está muy alterada”, agregó.
Por otro lado, el diario tuvo acceso a una carta del principal asesor de Carlos III, Clive Alderton, explicó a los empleados que “el cambio de papel para nuestros superiores significará también cambios para la residencia”.
“La cartera de trabajo que anteriormente detentaba esta residencia apoyando los intereses personales del príncipe de Gales, anteriores actividades y operaciones domésticas ya no continuará, y la residencia de Clarence House se cerrará”, señala Alderton. “Por tanto, se espera que los puestos basados principalmente en Clarence House (…) ya no se necesiten”, agrega.
Alderton reconoció que se trata de una noticia perturbadora, y aseguró a los empleados que recibirán ayuda para ser reubicados y una indemnización aumentada.
Por su parte, un portavoz de Clarence House explicó que las operaciones en dicha residencia han finalizado. Y, por lo mismo, “se ha abierto un proceso de consultas”, que hará que “aunque algunos despidos sean inevitables”, se estén “identificando roles alternativos para la mayor parte del personal”.