Una mujer camina con cierta postura encorvada y con los ojos puestos en el teléfono. Esta podría ser perfectamente una descripción de la actualidad, sin embargo, se refiere a una obra de arte de 1860. Cuando no habían teléfonos móviles.
De un momento a otro, el famoso cuadro “Los esperados” (Die Erwartete) del reconocido pintor austriaco Ferdinand Georg Waldmüller, pasó a convertirse en un debate de Internet. Y es que para algunos internautas, que buscan significado en lugares donde no los hay, este cuadro ha sido su último motivo de discordia.
Se trata de “imágenes pareidólicas, ilusiones ópticas donde se ven formas o figuras en objetos cotidianos. Así como las teorías de viajeros en el tiempo que han aparecido en numerosas ocasiones”, describe en DW. Y en este caso en particular, creen que la mujer ubicada en el centro del cuadro, sostiene un smartphone. Pero hace más de 160 años.
Una anomalía que ha generado asombro entre los espectadores. Mientras se preguntan cómo es posible haber encontrado una imagen así de extraña en una pintura tan antigua.
Ahora bien, en realidad, la respuesta es quizás más simple y no requiere de la ciencia. La mujer lleva un libro. Pero esta no es la primera vez que ocurre algo así.
Anteriormente, el gerente general de Apple, Tim Cook, visitó el Rijksmuseum de Ámsterdam y afirmó que un hombre en un cuadro holandés de 346 años de antigüedad parecía estar sosteniendo un iPhone. El cuadro es “Hombre entregando una carta a una mujer en el vestíbulo de una casa” de Pieter de Hooch, pintado en 1670.
El museo le respondió que lo que parecía un iPhone era en realidad el medio de comunicación común en el siglo XVII, es decir, una carta. Tal como lo indicaba el título de la obra, por lo demás.
Los actuales internautas fascinados por estas imágenes pareidólicas no fueron los primeros en cuestionarse algunas obras de arte. Peter Russell, un funcionario jubilado del gobierno local de Glasgow, fue el primero en cuestionar el cuadro de Pieter de Hooch al verlo en el museo Neue Pinakothek de Múnich en el verano de 2017, según informó Vice.
Para los expertos, estos debates demuestran el cambio radical en la sociedad. Y cómo nuestra percepción ha cambiando, siendo influenciada por la tecnología.
“El gran cambio es que en 1850 o 1860, todos los espectadores habrían identificado el objeto en el que está absorta la niña como un himnario o un libro de oraciones. Hoy, nadie podría dejar de ver el parecido con la escena de una adolescente absorta en las redes sociales de su smartphone”, afirmó Russell al medio citado.