En Avatar: Fuego y Ceniza, Oona Chaplin encarna a Varang, la líder del Clan Mangkwan, una de las fuerzas antagonistas más relevantes del nuevo capítulo de la saga ambientada en Pandora. Pero mientras su personaje habita un universo ficticio marcado por el fuego y el conflicto, la historia personal de la actriz está anclada a una herencia real y profundamente terrenal: un linaje chileno y mapuche que ella misma ha explorado, nombrado y reivindicado públicamente.
Nieta del icónico Charles Chaplin, Oona es hija del cineasta chileno Patricio Castilla, quien se radicó en España tras ser exiliado durante la dictadura. También, es nieta de la abogada y sufragista chillaneja de origen mapuche Hilda Valderrama. A lo largo de los años, la actriz ha subrayado la relevancia de esta herencia latinoamericana, especialmente a partir de un viaje que realizó hace algunos años al sur de Chile, con especial énfasis en la región del Biobío.
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En una conversación reciente con Culto, Chaplin recordó ese viaje como una experiencia profundamente transformadora. “A mí me llamó la sangre, me llamó la tierra, me llamó el canto, el ulkantun del sur, y fui a descubrir”, relató.
En esa misma entrevista profundizó en el impacto que tuvo este reencuentro con sus raíces: “Es un mundo muy potente, muy rico, de mucha complejidad también. Es una relación con el poder, una relación con todo lo que es la historia. Todo lo que ha pasado ha sido muy complejo y muy bonito, y muy feo también”.
Y continuó: “Pero lo que aprendí más que nada es que el ser mapuche realmente es ser persona de la tierra. La mapu, tierra; che, persona. Para mí ese fue el gran regalo, aprender lo que significa esa palabra y cómo puedo realmente honrar eso en mi vida. Ese es mi estudio ahora”.
La actriz añadió además una reflexión íntima sobre su vínculo emocional con nuestro país. “Es muy bonito Chile. Lo amo, amo el paisaje, y siempre es muy potente. Siempre me voy para Chile y luego necesito volver y tener como una semana para integrar, porque es muy potente para mí ir para allá“.
Antes de sumarse al elenco de Avatar: Fuego y Ceniza, Oona Chaplin ya contaba con un recorrido sólido en cine y televisión. Su papel como Talisa Maegyr en Game of Thrones la dio a conocer a nivel masivo, mientras que participaciones en series como Sherlock y Black Mirror consolidaron su perfil como una actriz versátil dentro de producciones de alto impacto.
