Suscríbete
Algo muy peculiar ocurrirá en el cielo durante dos meses. La Nasa informó que desde el 29 de septiembre hasta el 25 de noviembre la Tierra tendrá dos lunas orbitando a su alrededor. Es un asteroide que han denominado una “miniluna” y que fue descubierto el 7 de agosto.
“El pequeño asteroide, que los investigadores denominaron 2024 PT5, orbitará temporalmente la Tierra antes de regresar a un cinturón de asteroides que gira alrededor del sol. ¿La podremos ver? Daniel Silva, periodista de Mega, aseguró que “podrá verse en todo el mundo, sin embargo, no a ojo desnudo, porque es pequeñita”. El asteroide mide aproximadamente 10 metros. El periodista también informó que debido a su tamaño, no produciría ningún efecto gravitatorio en el planeta.
Ver esta publicación en Instagram
El sitio de “Usa Today” explicó que la miniluna además de pequeña es muy oscura para los típicos telescopios y binoculares de aficionados. Sin embargo, el objeto está dentro del rango de brillo de los telescopios típicos utilizados por los astrónomos profesionales. “Para observar este objeto se necesita un telescopio con un diámetro de al menos 76 centímetros, más un detector CCD o CMOS”, escribió el sitio.
La revista “Time” aseguró que “los científicos descubrieron el objeto utilizando el Sistema de Última Alerta de Impacto Terrestre de Asteroide en Sutherland, Sudáfrica, durante un monitoreo de rutina”. Los eventos anteriores de minilunas fueron de corta duración en 1981 y 2022, agregaron los investigadores.
¿Qué es una miniluna? “Se producen cuando piezas en el espacio, como un asteroide o piezas flotantes de basura espacial, participan temporalmente en orbitar la Tierra y algunas completan una revolución completa”, explicó “Usa Today”.
Ver esta publicación en Instagram
“Es bastante cool (sobre la miniluna)”, dijo Federica Spoto, investigadora de dinámica de asteroides en el Centro de Astrofísica de Harvard y Smithsonian al diario “The New York Times”. Añadió que las observaciones de 2024 PT5 reforzarán el conocimiento de los científicos sobre el tipo de rocas espaciales que revolotean cerca de la Tierra, incluidas aquellas que ocasionalmente chocan contra ella.
“Cada vez que se descubre un objeto con una órbita tan parecida a la terrestre, existe la posibilidad de que simplemente estemos recuperando desechos espaciales”, afirmó Raúl de la Fuente Marcos, astrónomo de la Universidad Complutense de Madrid y coautor del estudio. Pero, dijo, las observaciones de 2024 PT5 indican que “es un objeto natural, de eso no hay duda”.
