Todo el desaire entre los Windsor y los Sussex parecía olvidado luego del té que se tomaron el príncipe Harry y Meghan Markle con la Reina Isabel II el jueves pasado en el Castillo de Windsor, que incluso le significó a la pareja una invitación para el jubileo de platino de la monarca. Pero unas nuevas declaraciones del príncipe a la cadena estadounidense NBC durante su viaje a La Haya podrían poner de nuevo en pie de guerra a la familia.
El hijo pequeño de Diana y Carlos, comentó la visita a su abuela en la entrevista y dijo que se está “asegurando de que la reina Isabel II esté protegida y tenga a las personas adecuadas a su alrededor”. Este comentario deja entrever, por un lado, la voluntad de Harry de que su criterio se tenga en cuenta en Windsor tras su renuncia, y por otro, que Isabel II no siempre estaría bien rodeada y que necesita de su protección. Otros ven solo un nuevo intento del príncipe para que sus conexiones con la familia real británica no se vean subestimadas de cara al público. Sea como sea, las palabras de Harry no han caído bien entre algunos expertos en realeza británicos, pues lo ven como una crítica directa al príncipe Carlos y al príncipe William, los que según ellos serían los legítimos encargados de apoyar a la Reina Isabel II todo el tiempo, y no solo durante una visita para tomar el té.
“¿Cómo es eso? Creo que encontrará que el príncipe Carlos, el resto de hijos de la reina Isabel II y el príncipe William están haciendo eso exactamente y apoyando a la reina con acciones y no solo con palabras”, ha dicho el corresponsal de la realeza, Robert Jobson en sus redes sociales. El ex diputado conservador David Mellor fue bastante más duro diciendo que “creo que su vida está totalmente distorsionada al convertirse en una figura tipo Kardashian, donde está rodeado de personas que quieren fotografiarlo, y la reina se vuelve importante para él solo porque tiene que visitarla para mantener su credibilidad en Netflix”.
En la misma entrevista, el príncipe habló sobre cómo se encuentra su abuela, que hoy jueves cumple 96 años: “Estar con ella fue genial. Fue tan agradable verla, está en buena forma. Ella siempre tiene un gran sentido del humor conmigo y yo solo me aseguro de que esté protegida y tenga a las personas adecuadas a su alrededor. Tanto Meghan como yo tomamos el té con ella, así que fue muy agradable ponernos al día”. Cuando parecían completamente aislados de la familia real británica, los Duques de Sussex han sido invitados a aparecer en el balcón del Palacio de Buckingham durante las celebraciones del jubileo de platino de la reina, que se llevarán a cabo entre los días 2 y 5 de junio.
Aunque el príncipe ya había viajado antes en solitario al Reino Unido, el jueves pasado fue la primera ocasión en que Meghan Markle se reencontró con Isabel II desde marzo de 2020. Por tanto, si Markle aparece en el balcón el próximo mes de junio, ese será el primer acto familiar en el que participa luego de la polémica entrevista con Oprah Winfrey, en la que ella reveló comentarios racistas de un miembro de los Windsor antes de la llegada de su primer hijo, Archie Mountbatten-Windsor.
Esta invitación indica que la familia real británica se encuentra en un nuevo punto en su relación con los Sussex tras la escandalosa renuncia y la polémica entrevista. Las celebraciones del jubileo serían la ocasión ideal para reunir de nuevo a toda la familia tras los muchos desaires, y sería visto como un acto de perdón por ambas partes: tras los comentarios racistas que habrían rodeado el embarazo de Markle, y tras las muchas afirmaciones dañinas que realizaron los Sussex a Winfrey.