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Puede convertirse en la mejor estrategia publicitaria. Y aunque no lo diga, él lo sabe. Lo cierto es que el hijo de Julio Iglesias e Isabel Preysler y a punto de lanzar su nuevo trabajo discográfico Final Vol.1, anunció en una entrevista con el programa español El Hormiguero que hará una pausa indefinida, aunque momentánea, en su carrera.
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Podríamos decir que, aunque le costó, Enrique logró hacerse un lugar en la música sin la sombra de su padre, cuyas canciones, según cuenta la leyenda, se escuchan cada tres segundos en cualquier punto del planeta. Después de once discos, Enrique confesó que “es el tiempo adecuado de parar”. Ojo, dice parar. Nada de retiro ni jubilación anticipada. No señor.
El portal CelebrityNetworhs calcula que la fortuna de Enrique Iglesias asciende a 85 millones de dólares. Una cifra muy alejada a los 600 millones de su padre. Aún así, puede decir que disfruta de una vida muy acomodada. Incluso para, hace algunas semanas, poner a disposición de sus seres queridos su propio avión privado para asistir al funeral de su abuela Betty, madre de Isabel Preysler.
Pese a su fortuna, Enrique siempre ha sido muy celoso de la privacidad que disfruta en su mansión de 1.628 metros cuadrados en Bay Point, avaluada en 26 millones de dólares, que incluye 12 baños, 7 dormitorios, un gran jardín, una piscina enorme, cancha de tenis y un muelle privado, porque a la voz de Duele el corazón le encanta navegar en barco. Además ha hecho inversiones en otras lujosas zonas de Miami, especialmente lugares donde viven Cher, Ricky Martin, Gloria Estefan, y su propio padre.
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Hace 20 años conoció al amor de su vida, la tenista de origen moscovita Anna Kournikova, con la que tiene tres hijos. En su Instagram, se ve a Enrique enseñándoles a nadar, a tocar algún instrumento o jugando en el suelo con ellos. El menor de los Iglesias odia los paparazzis, razón por la que levantó un muro de cinco metros alrededor de su mansión y hasta sus fans se sorprendieron cuando publicaron las fotos de sus hijos.
“Cuando los veo me ponen de buen humor, me lo paso genial con ellos. Ser padre es algo que nunca me imaginé cómo sería, pero soy muy feliz con ellos, por eso me gusta estar mucho en casa”, dijo en la entrevista sobre su rol como padre, faceta que con esta pausa indefinida podrá disfrutarlos hasta que le duela el corazón y los pies, como dice su canción.
