Hace un par de horas Angelina Jolie volvía a encender la hoguera de una disputa que no tiene fin aparente. La actriz acusó a Brad Pitt de haber agredido a dos de sus hijos física y psicológicamente, usando estos detalles en su juicio por la venta “ilegal” de su parte del viñedo que ambos comparten.
Todo por un rosé. Así es. Meses atrás Brad acusaba a su ex esposa de haber vendido maliciosamente su parte de la bodega francesa. Sin consultarle, Jolie eligió a un empresario ruso, ni más ni menos, como el mejor comprador. Evidentemente, esto desató la molestia del ganador del Oscar, ya que, según su defensa, ambos habían acordado que en caso de ventas se debía informar y consultar a la otra parte.
Sin embargo, la actriz asegura que debido al conflicto que tuvieron en un avión hace 6 años, ella no solo se vio en la obligación de exigir el divorcio, sino que aquella experiencia también habría influenciado la venta de su parte del viñedo.
Entonces, decidió acusar legalmente a Brad, de 58 años, de “asfixiar a uno de sus hijos y agredir a otro” durante un vuelo de Niza a Los Ángeles en septiembre de 2016. Además de agarrar la cabeza de la actriz, sacudirla y empujarla contra la pared. Todas actitudes que habrían influido en su decisión y, por ende, no cumplió el contrato.
Recordemos, que estas acusaciones ya se habían realizado. Pero, ahora, Angelina suma detalles. Es más, Pitt reconoció en ese entonces, 2016, haberles gritado, pero negó rotundamente haberlos golpeado. En cambio la actriz insiste en que “tuvo una confrontación” con uno de sus hijos. Y que cuando ella le preguntó en el avión qué le pasaba, él “la acusó de ser demasiada considerada con los niños” y “la atacó verbalmente”. Luego vendrían los gritos y golpes que ha relatado. Además de revelar que dicho comportamiento del padre, habría dejado a los niños traumatizados.
Estas nuevas acusaciones llegan precisamente mientras Brad la enfrenta en su batalla legal por el Château Miraval, el castillo y la bodega francesa que compraron juntos y que ella vendió sin su consentimiento. Jolie, por su parte, afirma que ella se lo ofreció a él primero, pero sus abogados señalan que las conversaciones con el equipo del actor se interrumpieron cuando él la exigió firmar “un acuerdo de confidencialidad” que le prohibía hablar fuera de la corte sobre el abuso físico y emocional de él hacia ella y su familia.
Los representantes de Brad Pitt siguen manteniendo sus argumentos. Y uno de ellos comentó a The Hollywood Reporter que Jolie “sigue repitiendo, revisando y reimaginando su descripción de un evento que sucedió hace seis años al agregar información completamente falsa cada vez que no obtiene lo que quiere”. Y es que su historia evoluciona, y cada vez le agrega más detalles.
En ese entonces, la investigación se llevó a cabo por el FBI, pero no avanzaron a más ya que, según la institución, las acusaciones eran insuficientes. Es más, fuentes cercana comentaron a TMZ que el Departamento de Servicios para Niños y Familias también realizó su parte, pero que también acusaron falta de pruebas.
Según fuentes cercanas al actor, sus seis hijos ahora están separados de él. Y tiene una “relación limitada y tensa, debido a su campaña de alienación”, comentó la misma fuente.