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Barbie continúa con sus esfuerzos por convertirse en agente de cambio con la inclusión y la igualdad de género como sus principales banderas de lucha, y esta vez en el marco del mes del orgullo LGBTQ+ presentó a su nueva muñeca.
En el lanzamiento de la colección Barbie Tribute, que rinde homenaje a personas inspiradoras que tienen un impacto en la sociedad, la empresa dio la bienvenida a la primera muñeca transgénero, inspirada en Laverne Cox.
Actriz, productora, escritora y activista por los derechos de la comunidad LGBTQ+, Cox, cuatro veces nominada al Emmy y productora ganadora del mismo, se convirtió en una activista que ha ganado mucho reconocimiento durante los últimos años.
Conocida por su papel en Orange is the New Black, encarna todos los valores de la colección de Barbie. Su muñeca, viene con tres trajes, y un maquillaje y peinado extravagantes fieles al estilo de Laverne.
«Fue un sueño tener la oportunidad de colaborar con Barbie para crear mi propia muñeca», aseguró Cox. «Espero que cuando la gente vea esta Barbie, pueda soñar con conseguir grandes cosas, como yo he tenido la suerte de hacer en mi carrera».
«Espero que mi muñeca pueda inspirar a la gente a contar historias en las que la diversidad juegue un papel más importante y a ser más tolerantes y acogedores», añadió la actriz. «Sobre todo, me gustaría recordar a los niños que es importante sentirse bien con uno mismo».
Barbie continúa en la lucha por la igualdad de género
Ya en agosto del año pasado, Mattel había homenajeado a Sarah Gilbert, investigadora que dirigió la creación de la vacuna contra el covid-19 de Oxford-AstraZeneca, y un grupo de mujeres que destacaron en la crisis de la pandemia por el Coronavirus.
Más tarde ese mismo mes, la lanzadora de bala paralímpica Francisca Mardones se convirtió en la primera chilena en tener su propia muñeca Barbie. Lo que sería parte del proyecto Sheroes, centrado en mujeres destacadas en distintas áreas.
Después, en enero de este año, la marca colaboró con Balmain, liderada por Olivier Rousteing, quien aseguró que la colección reflejaba el deseo de ambas marcas de «construir un futuro más diverso e inclusivo: en el que ya no nos definen el género, el color, la talla u otras normas sociales».
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A la colección de la que es parte Cox, también se suman muñecas de la Reina Isabel II, la diseñadora Vera Wang, y Lucille Ball, por su compromiso con las industrias del entretenimiento, los servicios y la moda.
