Revista Velvet | Bárbara Hernández: Que convirtió el miedo en Récord Guinness
Entrevistas

Bárbara Hernández: Que convirtió el miedo en Récord Guinness

Bárbara Hernández: Que convirtió el miedo en Récord Guinness
Entrevistas

Bárbara Hernández: Que convirtió el miedo en Récord Guinness

POR equipo velvet | 07 septiembre 2025

“La Sirena del Hielo” no solo desafía las aguas heladas con aplomo, también inspira con su historia de resiliencia y pasión. De la niña de recoleta que veía cómo su nombre no figuraba entre los mejores, se transformó en la deportista chilena con más Récords Guinness. Hoy es un referente cuyo liderazgo inspira porque invita a perder el miedo al miedo. “Es cuestión de estrategia, amor propio y persistencia”, asegura.

Por Claudia Paz González Fotos Gentileza Bárbara Hernández

En una fría mañana, muy cerca del lugar donde cada día llega a entrenar al alba, Bárbara Hernández transmite esa energía que solo tienen quienes han caminado el camino de sus sueños. Días atrás, se convirtió en la única chilena en completar el cruce doble del Canal de La Mancha y en la segunda mujer latina en lograrlo en más de 30 años, consagrándose como la deportista chilena con más Récords Guinness de la historia.

Nuevamente, su hazaña recorrió los principales medios de comunicación, como The New York Times, BBC World, The Guardian, CNN International y ESPN; y sus travesías por la Antártica, Cabo de Hornos, el Canal Beagle y el Lago Chungará volvieron a llenarla de esos elogios que la han posicionado como un referente de la natación en aguas frías y en la promoción de la práctica deportiva.

Sus jornadas comienzan a las 5 de la mañana y se extienden hasta pasadas las 11 en entrenamientos, exámenes y reuniones con el equipo que la acompaña desde sus inicios. El resto del día se reparte entre charlas motivacionales, trabajo con marcas, planificación de expediciones –como su próximo regreso a la Antártica– y, cuando puede, momentos en familia. “Esto es 24/7. El fin de semana intento descansar, pero un nado así no se saca solo con entrenamiento: detrás hay una logística enorme. Ahora, en lo particular, estoy tratando de descansar y compartir en familia. Creo que una de mis falencias es precisamente que estoy siempre construyendo y pocas veces me detengo a disfrutar lo que ya conseguimos. Así que en eso estoy ahora”, sentencia.

Desde su primera incursión en aguas gélidas en 2014, tras nadar en el glaciar Perito Moreno, Bárbara Hernández inició un camino que la llevó a conquistar el circuito mundial de Winter Swimming y a convertirse en campeona planetaria en 2016, 2020 y 2024. En 2019 se convirtió en la primera mujer chilena en cruzar el Canal de La Mancha y el Canal de Catalina, y en 2020 sumó hitos como el cruce del Lago Chungará, el Canal Beagle y el “20 Bridges” en Nueva York, logrando la Triple Corona de aguas abiertas. Su carrera continuó con récords Guinness en 2022 por unir a nado el Pacífico y el Atlántico en Cabo de Hornos y, en 2023, por ser la primera persona en nadar 2,5 kilómetros en aguas antárticas sin protección térmica. Finalmente, en 2024 selló su lugar en la historia al completar el Estrecho de Tsugaru en Japón y convertirse en la primera sudamericana en lograr el desafío Ocean’s Seven, que reúne los siete cruces oceánicos más exigentes del planeta.

A su juicio, “en Chile tenemos talentos increíbles y una geografía única para el deporte, pero seguimos dependiendo más de la voluntad personal que de un verdadero apoyo integral. No basta con aplaudir los logros cuando ocurren; necesitamos políticas, financiamiento y acompañamiento constante para que los deportistas no tengan que luchar solos contra el frío… y contra el sistema”.

PENSAMIENTOS INTRUSIVOS

En sus conferencias, el mensaje de esta psicóloga de la Universidad de Chile está muy lejos del exitismo y el positivismo a ultranza. Para ella, cada logro es una plataforma para su verdadero mensaje: no dejar que el miedo paralice y atreverse a perseguir los sueños. “No me interesa pararme a decir: ‘Miren lo increíble que soy’. Me expongo tal cual soy, con mis miedos y fracasos, para mostrar que, aun con eso encima, es posible seguir adelante”, confiesa mientras bebe un sorbo de su latte.

Con más de dos décadas de trayectoria, títulos mundiales y marcas históricas, reconoce que, si hay algo que nunca se va en cada prueba, es el miedo: “La clave es decidir persistir por sobre todas las cosas. El punto no es eliminar el miedo, sino aprender a atravesarlo. Por eso, nunca hablo desde los logros, sino desde la vulnerabilidad. Mi foco está en cómo usar el tiempo como aliado, aceptar el peso de la incertidumbre y seguir”, dice.

–¿Qué te pasa cuando ves la inspiración que generas en el otro?

–Creo que es súper emocionante. Me lo tomo con harta responsabilidad, porque creo que lo que hago en las charlas, más allá de lo que pueden hacer otros speakers –que siempre es desde el logro, desde ‘miren lo que yo soy capaz de hacer’–, es exponerme y ser súper vulnerable. Mostrar lo difícil que es, que aun teniendo casos de éxito en tu trayectoria, siempre vas a tener miedo. El fracaso o el miedo al fracaso te acompaña gran parte del viaje, junto con la expectativa y la presión del resto. Entonces, eso lo expongo y muestro cómo, aun con eso, genero estrategias para seguir avanzando.

–¿Nunca dudaste?

–Más de una vez, cuando era adolescente, porque no era la más rápida ni la más fuerte. Entonces, más de alguna vez me cuestionaba para qué seguir si no era tan buena. Pero yo seguía nadando porque nadar me hacía feliz, y esa era una razón más que suficiente. Con el tiempo, quise romper paradigmas y convertirme en la mejor en lo que amaba: nadar en hielo.

En cada reto, un equipo reducido pero clave la acompaña: su marido, oficiales de la Armada, su entrenadora, nutricionista y navegantes con experiencia polar. “Ellos trabajan gratis. Sin ellos no hay Sirena del Hielo. Son los que me alimentan cada media hora, me cuidan y me monitorean. Su entrega es irremplazable”.

Tras años de logros autogestionados junto a su fiel equipo, Bárbara decidió iniciar la constitución de la Fundación Bárbara Hernández, cuyo objetivo es impulsar la natación en Chile y profesionalizar la práctica de aguas abiertas, especialmente en regiones. “Esto no puede depender solo de la buena voluntad. Queremos dar estructura, apoyo y condiciones para que más personas disfruten y se entrenen de forma segura en nuestro mar”, cuenta, al tiempo que admite que lo social siempre la ha rodeado y que en más de una oportunidad incluso se ha visto tentada a seguir una carrera política, algo que hoy no está entre sus planes.

–¿Cómo te proyectas en 20 años?

–Mmm… no sé, espero que nadando. Me casé el año pasado y todavía estamos en esa etapa en que no sabemos si queremos ser papás o no. Por el momento, congelamos óvulos para tener más tiempo, para poder decidir eso y dedicarme a nadar todo lo que pueda. Recién estamos dilucidando esa parte, pero me veo trabajando con organizaciones que busquen la protección del océano y de los glaciares de la Antártica. Y, por supuesto, promoviendo la natación en Chile. Creo que nos queda harto trabajo por hacer (ríe).

Hoy, mientras el sol se niega a entibiar el ambiente, Bárbara Hernández recuerda con emoción a sus primeros dos fans: sus abuelos. Guarda en la memoria el cariño y la complicidad de ambos, y cómo coleccionaban con orgullo las publicaciones y recortes de prensa desde su primera portada en el diario La Cuarta, en 2015. “Su máxima emoción era verme aparecer en las noticias. No importaban las medallas ni los récords, para ellos, el simple hecho de que ingresara a la Universidad de Chile ya era el mayor triunfo posible. En sus ojos, yo ya era ‘la mejor del mundo mundial’, y esa incondicionalidad sigue acompañándome cada vez que me lanzo al agua. En muchos sentidos, creo que sigo nadando por ellos también”, reflexiona.

Recientemente, Bárbara conquistó su cuarto Récord Guinness con el nado más largo de la historia en Puerto Natales. Nadando 3,84 kilómetros en el Canal Señoret, con temperaturas extremas de 4,5 ºC en el agua y 0 ºC en el ambiente, apenas un mes después de su histórico doble cruce del Canal de la Mancha.

Te puede interesar