Nueva York no solo fue testigo de un triunfo deportivo histórico. Sino también de un inesperado cruce entre dos figuras que, por un breve capítulo de sus vidas, estuvieron ligados por el clan Kardashian-Jenner: Timothée Chalamet y Bad Bunny.
El actor y el cantante coincidieron la noche del viernes en el Madison Square Garden para presenciar el sexto partido de las semifinales de la NBA entre los New York Knicks y los Boston Celtics. Pero más allá del marcador, este peculiar ‘panorama de ex cuñados’ capturó la atención.
Bad Bunny and Timothée Chalamet ♥️ pic.twitter.com/QlvfojalYR
— Access Bad Bunny (@AccessBadBunny) May 17, 2025
Ambos compartieron entusiasmo por los Knicks, justo en medio de un contexto sentimental que no pasó desapercibido: mientras Chalamet mantiene una relación con Kylie Jenner, Bad Bunny fue vinculado durante meses con Kendall Jenner, su hermana.
Sin embargo, no se ha confirmado oficialmente cuándo terminó ese romance. Ahora, Kendall, de 29 años, reavivó rumores de reconciliación con su ex, el jugador de la NBA Devin Booker, en septiembre de 2024.
La presencia de las celebridades acaparó la atención de los medios. Según un video viral en TikTok, Chalamet se dejó llevar por la euforia tras la victoria de los Knicks, que sellaron la serie 4-2 y avanzaron a la final de la Conferencia Este por primera vez desde 1999, sacando la cabeza por la ventana de su auto, saludando a los fanáticos y recibiendo abrazos espontáneos.
Timothée Chalamet embraces the chaos outside MSG pic.twitter.com/VF5GPSwLrC
— New York Basketball (@NBA_NewYork) May 17, 2025
El actor de Call Me By Your Name, de 29 años, ya había asistido días antes al cuarto partido de la serie. Esta vez acompañado de Kylie Jenner en una cita en primera fila. Kendall también se unió, junto a un amigo.
Bad Bunny, por su parte, no pasó inadvertido, sumando una nueva aparición pública tras semanas de perfil bajo. El encuentro con Chalamet, aunque breve y aparentemente casual, selló una escena que solo la cultura pop podía regalar.
Entre los otros invitados de la noche destacaron Lenny Kravitz, Tracy Morgan, Spike Lee, la rapera Ice Spice y Ben Stiller. Consolidando una vez más el Madison Square Garden como el verdadero front row del espectáculo neoyorquino.