Tras el estreno de Blonde en el Festival de Cine de Venecia a principios de septiembre, Ana de Armas ha compartido con más detalle como fue el proceso de filmación de la biopic de la leyenda de Hollywood, Marilyn Monroe. 

Tras revelar que el fantasma de la icónica modelo y actriz estuvo en el set de filmación, y que incluso le dio consejos y tomó decisiones relevantes para la cinta, ahora, de Armas señaló que fue a la tumba de Monroe antes de iniciar con el rodaje para «pedir permiso».

«Nos dieron una gran tarjeta y todos los miembros del equipo escribieron un mensaje para ella. Luego fuimos al cementerio y lo pusimos en su tumba. En cierto modo, le pedimos permiso», dijo la actriz, de 34 años, en una entrevista con AnOther.

«Todo el mundo sentía una enorme responsabilidad, y éramos muy conscientes de la parte de la historia que íbamos a contar: la historia de Norma Jeane, la persona detrás de este personaje, Marilyn Monroe. ¿Quién era ella realmente?», dijo.

La tumba de Monroe, que nació como Norma Jeane Mortenson, está en el cementerio Pierce Brothers Westwood Village Memorial Park tras su trágica sobredosis en 1962, y hasta allá se movilizó el elenco de Blonde, junto a Andrew Dominik, el director de la película.

La película de Netflix sigue el ascenso a la fama de Monroe hasta su trágico final. Algunas de las escenas de la película se filmaron en el mismo departamento donde Monroe había vivido durante algunos años, así como en la misma habitación donde murió.

Blonde estrenará en Netflix el 23 de septiembre, y también cuenta con los papeles protagónicos de Adrien Brody y Julianne Nicholson.