Meghan Markle vuelve a estar en el centro de la conversación. Pero esta vez no por su vida en la realeza ni por su próximo programa en Netflix, sino por el logo de su renovada marca de estilo de vida, As Ever.
Y es que en Porreres, un pequeño pueblo en Mallorca, no están nada felices con el diseño. Según sus habitantes, es “casi idéntico” a su escudo de armas, que data de 1370.
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La alcaldesa de Porreres, Xisca Mora, ha pedido públicamente a Markle que modifique el logo de su marca, ya que considera que es una réplica del símbolo histórico del pueblo.
Sin embargo, llevar el asunto a tribunales no es una opción. “Demandar por plagio es complicado y costoso. Y un ayuntamiento pequeño como el nuestro no está en condiciones de pelear contra la corona inglesa”, explicó Mora en declaraciones a El País.
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El escudo de armas de Porreres muestra una palmera entre dos golondrinas, mientras que el logo de As Ever presenta una palmera con dos colibríes a los lados. Aunque las especies de aves y los colores son distintos, la alcaldesa cree que las similitudes son demasiado evidentes. “Pero son casi idénticos”, aseguró.
Los habitantes de Porreres tampoco están contentos con la situación, ya que consideran que Markle está utilizando su símbolo para vender productos como mermelada en todo el mundo.
“La verdad es que, aunque esto le ha dado a nuestro pequeño pueblo un poco de publicidad en solo unas horas, no nos gusta que usen nuestro escudo de armas, queremos que retiren el logo”, agregó Mora.
Eso sí, la alcaldesa dejó claro que Markle sería una invitada bienvenida si decide rediseñar su logo. Y de paso, promocionar la famosa producción de mermeladas del pueblo. “Si quiere, podemos invitarla a las fiestas patronales y dejar que sea la anfitriona”, dijo con un toque de humor.
Esta no es la única controversia en la que se ha visto envuelta As Ever. La marca también ha sido criticada por As Ever, una empresa de ropa fundada en 2015. Aunque su dueño, Mark Kolski, no tiene la marca registrada, dejó claro que no planea cambiar el nombre.
“Soy un negocio muy pequeño, es una operación familiar. Básicamente soy una banda de un solo hombre“, contó al Sun. “Este nuevo emprendimiento tiene el poder y el dinero de Netflix detrás. Incluso si quisiera hacer algo, no creo que tenga el ejército de abogados y el dinero que hay detrás de esto”.
