Además de su estilo, que aún es inspiración para miles, el otro aspecto del look de la princesa Diana que trascendió en el tiempo fue su pelo. Y ahora, salió a la luz lo que Lady Di estaba dispuesta a hacer para mantener perfecto su clásico peinado.
Sheree Ladove Funsch, la química cosmética que estuvo a cargo de ayudar a Diana a cuidar su icónico peinado, reveló a Page Six cómo trabajaron juntas en ese entonces y se encargaron de mantener todo en su sitio gracias a una laca especial.
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“Trabajé muy estrechamente con ella y con su peluquero (Richard Dalton) por aquel entonces”, contó Sheree, que tenía poco más de 20 años cuando recibió la llamada, que solicitaba de su ayuda.
La química, reveló que en dicha llamada, le solicitaron asistencia para crear una fórmula específica que ayudara a Diana a evitar el “pelo de helicóptero” durante sus viajes por todo el mundo.
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“Cuando bajaba del helicóptero, las aspas giraban y giraban y su pelo se despeinaba”, explicó, Ladove Funsch, de 57 años, actual directora de LaDove Inc. “Así que su precioso corte peinado se volvía loco”.
Diana quería una laca que tuviera “fijación firme” pero que pareciera suave, algo que no arruinara su “imagen juvenil y elegante”. “No quería nada que hiciera que su pelo pareciera pegado porque era muy joven y muy guapa. No quería un aspecto de cabeza de casco”.
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Así, Ladove Funsch se propuso crear lo que ella, Diana y Dalton llamaron “Helicopter Hairspray”. Que finalmente, se perfeccionó tras una serie de “pruebas y tribulaciones”, según explicó.
En el mismo medio, reveló que su búsqueda incluyó muchos viajes internacionales, explorando bosques frondosos y terrenos exóticos, para encontrar ingredientes raros aptos para un producto aprobado por la princesa.
“Encontramos la resina de goma de un árbol y así pudimos crear esta fórmula (para Diana)”, contó. “Yo estaba literalmente en (el laboratorio) formulando, averiguando cuál es el punto de fusión de esta resina”.
Después, y a través de llamadas telefónicas con Diana y Dalton, Ladove Funsch se enteró de que se necesitaba una fórmula de laca nueva. Esta vez, para interactuar de forma segura con las preciosas tiaras del palacio.
“Había dos versiones. Estaba la versión helicóptero y luego la versión joya. Porque cuando se ponía una tiara, se trataba de millones y millones de dólares en joyas“, explicó.
Así, decidió eliminar de la primera laca los ingredientes que pudieran dejar residuos en los diamantes. “Teníamos que crear algo que no fuera tan potente como una laca, pero que le diera un poco de fijación… sin estropear las joyas“, explicó.
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Ladove Funsch también señaló que ella y Diana no hablaron de vender el Helicopter Hairspray o su homólogo para piedras preciosas en el mercado. Aunque reveló que la idea “podría haberse materializado más adelante”.
“No digo que no lo hubiera lanzado en algún momento y que no quisiera hacer algo así, pero ésa no era la intención”, explicó al mismo medio. “Era simplemente (crear) algo increíble (para ella)”.