El mundo del cine despide a Diane Keaton, una de las figuras más queridas y singulares de Hollywood, cuya salud se deterioró con rapidez en los últimos meses. Según confirmó People, la actriz murió en California, rodeada de su familia más cercana. No se ha revelado la causa de su muerte.
“Su estado empeoró de forma muy repentina, lo que fue desgarrador para todos los que la amaban”, confesó un amigo cercano a la publicación, describiendo el impacto inesperado de su partida.
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Durante su enfermedad, Keaton y los suyos optaron por mantener la situación en absoluta reserva. “En sus últimos meses, estuvo rodeada solo de su familia más cercana, quienes decidieron mantener todo en la más estricta privacidad. Ni siquiera sus amigos de muchos años estaban completamente al tanto de lo que ocurría“, explicó la misma fuente.
Esa discreción, tan característica de la actriz, contrastaba con su luminosa presencia pública. En marzo, dio una señal que muchos no comprendieron en ese momento: puso a la venta su célebre “casa de ensueño” en Los Ángeles por 29 millones de dólares. Una decisión que sorprendió incluso a sus amigos más íntimos, ya que Keaton había asegurado en más de una ocasión que planeaba permanecer allí “para siempre”.
Hasta hace pocos meses, era habitual verla pasear a su perro por las calles de Brentwood, su vecindario de toda la vida. “Amaba su vecindario”, contó otra fuente. “Hasta hace apenas unos meses, salía a caminar con su perro todos los días. Casi siempre vestía igual, con un sombrero y sus característicos lentes de sol, sin importar el clima“.
La imagen es casi cinematográfica: la mujer del sombrero, los lentes oscuros y una elegancia sin esfuerzo que trascendía modas. “Siempre fue muy amable, divertida y conversadora. Le hablaba a su perro como si fuera una persona. Era excéntrica y tenía ese aire de la vieja escuela de Hollywood. Era realmente, realmente especial“, añadió la fuente.
Ganadora del Oscar por Annie Hall y protagonista de títulos inolvidables como El Padrino, Alguien tiene que ceder y El club de las divorciadas Diane Keaton deja un legado de autenticidad, humor y encanto irrepetible.
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Sus dos hijos, Dexter y Duke, a quienes adoptó en sus cincuenta, la despiden hoy en la más profunda intimidad. En su última publicación de Instagram, compartida en abril, se le veía sonriente junto a su perro Reggie. La sonrisa amplia, el espíritu intacto. Una última imagen que parece decirlo todo: incluso en la despedida, Diane Keaton siguió siendo ella misma.
