Nuevos tiempos, nuevas generaciones y la reinvención de productos para llegar a todo público. En un mundo en el que facilitarnos las cosas es prioridad, en vez de ponernos obstáculos, el rubro de las bebidas y el vino ha sabido adaptarse a las necesidades actuales.

Así aparece el vino en lata, ready to drink. Solo basta con abrir y tomar, fin. Tener un buen vino, donde quiera que vayas. Una idea simple y básica, que apuesta a los amantes del vino en todo momento. Desde un pequeño pic-nic, un fin de semana de camping o cualquier escapada outdoor de la que el vino es también un acompañante más. O simplemente, no tener que abrir una botella si solo quieres una copa.

Este formato ha sido implementado con éxito en países europeos y Estados Unidos. De acuerdo con datos de la consultora Nielsen, el mercado de los vinos en lata alcanzó en 2018 un valor de US$ 70 millones en Estados Unidos, lo que representó un aumento de 70%. En el Reino Unido, la categoría ha crecido un 125% interanual hasta agosto de 2019, y con un valor cercano a los £3.6 millones. “Los vinos enlatados cada día ganan más terreno y los datos sugieren que esta será una tendencia duradera, no una moda pasajera”, comentaron a Forbes desde Nielsen.

Además sus beneficios resultan ineludibles. Es fácil de llevar, viene en tamaño individual, es de calidad, más rápido de helar, no se quiebra, no necesitas sacacorchos y es más amigable con el medio ambiente. Esto último, clave e una sociedad que cada día se preocupa más del planeta.

Bernardo Serrano, director de La Coctelera, en tanto, asegura que la categoría ready to drink es una de las que más está creciendo y no solo con vinos y espumantes: “Se han sumado muchas marcas reconocidas del rubro de los destilados que ofrecen coctelería clásica, que basta con poner la mezcla en un vaso, agregar una decoración o nuestro toque y la preparación está lista”.

Por lo mismo, podemos ver que actualmente en el mercado nacional hay disponibles diferentes opciones, entre ellas, #Winemode con sus variedades Rosé, Sauvignon Blanc y Pinot Noir, y originales diseños en sus tres latas. 

Y también, Viña Santa Rita con su lanzamiento Rita Rosé, el primero en lata, Blanc  (Sauvignon Blanc) y Sparkling, un espumante brut bajo en calorías. 

Además, se destacan el pisco to go, los spritzers, sangrías e incluso whiskys que vienen con bebidas cola o tónicas.