Revista Velvet | Un brindis bien hecho: claves para servir espumante y cerrar el año como corresponde
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Un brindis bien hecho: claves para servir espumante y cerrar el año como corresponde

Un brindis bien hecho: claves para servir espumante y cerrar el año como corresponde
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Un brindis bien hecho: claves para servir espumante y cerrar el año como corresponde

POR admin | 23 diciembre 2025

Temperatura, copa y orden importan más de lo que parece. En medio de cenas extensas y celebraciones que se alargan hasta la madrugada, pequeños detalles pueden marcar la diferencia al momento de descorchar un espumante en Año Nuevo.

Las fiestas de fin de año vienen acompañadas de mesas cargadas, sabores intensos y brindis repetidos y, cuando se trata de espumantes, no todo da lo mismo. La forma en que se sirven incide directamente en la experiencia y en cómo se perciben sus aromas, burbujas y frescura.

Desde Riccadonna, histórica casa italiana de espumantes, mencionan que el primer paso es la temperatura: servir el espumante bien frío, idealmente en torno a los 5 °C.. A eso se suma la elección de la copa: la flauta o la tulipán siguen siendo las más recomendadas, ya que permiten apreciar la columna de burbujas y la calidad del espumante, además de concentrar mejor los aromas.

La apertura también tiene su propia lógica. Lejos del corcho disparado al techo, hoy se impone el descorche silencioso, una práctica que privilegia el control por sobre el espectáculo. Para lograrlo, se recomienda sujetar firmemente el corcho y girar suavemente la botella, permitiendo que el gas se libere de manera gradual. Al servir, inclinar la copa en un ángulo de 45 grados; esto ayuda a conservar la efervescencia y mantener la frescura del vino hasta el último sorbo.

Otro de los errores más habituales durante las celebraciones es no considerar el orden en que se sirven los espumantes o la elección según la comida de la noche. “Saber que el orden de los factores sí altera el brindis es clave, así como elegir la variedad adecuada según lo que se va a comer: empezar por lo seco y dejar lo dulce para el final permite que cada etiqueta brille en su momento. Queremos que este fin de año la gente se atreva a celebrar tanto los grandes como los pequeños momentos, usando ingredientes simples que eleven su copa sin perder la esencia de la uva”, comenta Luis Llanos, Brand Ambassador.

Bajo esa misma lógica —entender el espumante como parte de la experiencia y no solo como un gesto puntual—, para quienes celebran en casa y buscan salir del servicio tradicional, la consigna es clara: mantenerlo simple. Desde Riccadonna señalan que el espumante puede disfrutarse solo o con pequeños guiños que respeten su perfil y no opaquen su carácter.

  • Prosecco: manzanas y notas frutales.
  • Moscato Rosé: perfiles cítricos y vibrantes.
  • Asti: notas herbales y frutos tropicales.
  • Ruby: frutos negros para un up de intensidad.

En celebraciones donde lo central vuelve a ser compartir, un brindis bien hecho no requiere excesos ni grandes complicaciones. Basta con cuidar la temperatura, elegir la copa adecuada y seguir el orden sugerido para que cada espumante cumpla su rol y acompañe, como corresponde, la llegada de un nuevo año.

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