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Acá no hay superhéroes de Marvel ni es una franquicia de Disney ni de Star Wars. Tenet, la película de Christopher Nolan y que iba a salvar a los cines después de la pandemia, tuvo una recaudación en su primer fin de semana de 9,4 millones de dólares en Estados Unidos y recaudó globalmente 363,7 millones. En cambio Top Gun: Maverick sumó 126,7 millones de dólares en la taquilla estadounidense en un solo fin de semana, y en menos de una semana ya ha sobrepasado los 282 millones en todo el mundo. Ha superado todas las expectativas y cada día que pasa bate un récord nuevo entre el público.
¿A qué se debe el repentino éxito de una secuela sobre un clásico que data de 1986? ¿Hay algo de nostalgia acá? Hay algo de eso. Aunque su versión original dirigida por Tony Scott fue el número uno en su estreno, también fue duramente despedazada por los críticos de aquel entonces hasta acabar convertida en una de las peores películas pero de las más icónicas de los 80. 8 millones de dólares recaudó esa primera Top Gun durante el primer fin de semana. Muy por debajo de los 126,7 de su versión actualizada.
Otro dato bastante meritorio: el público que ha acudido a ver Top Gun: Maverick es aquel que lleva años abandonando los cines, repletos ahora de adolescentes fanáticos de las películas de superhéroes. En cambio, según el sitio especializado The Hollywood Reporter, la nueva película de Tom Cruise ha traído a un 90% de mayores de 25 años, especialmente entre los 35 y los 55 (un 67%) y un 21% que son incluso mayores a ese rango de edad.
Lo cierto es que Tom Cruise no había logrado un éxito semejante ni con las mejores películas de la secuela de Misión: Imposible. Y esto se debe a que hay un público considerable deseando volver a los cines para ver películas de acción donde el CGI no sea el protagonista, las capas de efectos especiales cedan ante personajes reales y la acción física y artesanal recupere aquello que tantos extrañamos de aquellos filmes de los 80 y de los 90.
Al 31 de mayo, Top Gun: Maverick llevaba recaudados 282 millones de dólares en todo el mundo, y aún falta por estrenarse en poderosos mercados como China y Rusia. La película costó 170 millones y se espera que recupere con creces la inversión
