El calor y el ambiente seco del verano nos hacen tomar líquidos con mucha más frecuencia. Por lo mismo debemos tener cuidado con la cantidad de bebidas, jugos o tragos preparados que podemos llegar a tomar.
El agua tiene que seguir siendo nuestra principal fuente de hidratación, aunque también podemos hidratarnos a través de la comida.
Es por esto que añadir algunas frutas, hierbas o incluso hortalizas, a pesar de que en algunos casos dará un efecto más decorativo que saborizante, puede ayudar a hacer más atractivo el consumo de agua para quienes les cuesta un poco más.
Frutas:
Lo interesante de aromatizar y decorar el agua con fruta es el bonito efecto que crea, ya que aporta colores vivos y alegres, que hacen mucho más apetecible un vaso de agua.
¡Pero ojo! Si la fruta ya está muy madura, el aspecto no será agradable a la vista y además puede empezar a disolverse con el agua.
Por otro lado, dependiendo de cada variedad podemos cortarla al gusto, siempre buscando el mejor efecto. Por ejemplo, las frutas pequeñas como arándanos, frambuesas o cerezas se pueden dejar enteras. Y en el caso de frutas más grandes como la sandía, la piña, el mango y el melón, se pueden cortar en cubos o también en rodajas y medias lunas.
Incluso podemos ponernos artísticos y cortar formas con un cuchillo o usando cortadores de galletas, por ejemplo sacando estrellas y corazones ¡Lo emocionante es improvisar combinaciones de frutas, aromas y colores dependiendo de la inspiración que tengamos!
Flores:
Las flores frescas o secas pueden añadir mucho aroma, pero además quedan muy bonitas en el agua, especialmente si las congelamos dentro de cubitos de hielo.
Entre las flores más comunes que podemos usar encontramos las rosas, la rosa china, el jazmín, la flor de saúco, la lavanda, las violetas, el azahar o incluso crisantemos.
Si lo que buscas es el máximo sabor, deja las flores infusionando toda la noche para que liberen mucho más sus aromas.
Además de flores podemos usar especias, pero teniendo cuidado de no pasarnos con la intensidad ¿Ejemplos? Canela en rama, clavos de olor, pimientas en grano, semillas de cilantro o de mostaza, vainilla, anís estrellado, etc.
Hortalizas y verduras:
También las verduras y hortalizas pueden dar un toque a nuestras aguas de verano, y añaden no sólo color, sino que también vitaminas.
Las verduras más duras y resistentes son las mejores para sumergirlas en agua, como la zanahoria, el apio o el clásico pepino. En cualquier caso, lo interesante es jugar con la variedad de colores y formas.
Acá te dejamos algunas ideas de combinaciones para empezar a preparar tus aguas de verano: