Buscando cada vez más espectacularidad para sus películas, Tom Cruise había echado el ojo al archipiélago de Svalbard, un conjunto de islas situadas en el océano Ártico, tierras que pertenecen a Noruega, para rodar allí algunas escenas de su próximo éxito: Misión Imposible 8. Pero no va a poder ser. Y todo para no perturbar la vida de sus habitantes, entre ellos unos 3 mil osos polares.

El actor y productor no ha conseguido que el gobernador Lars Fause autorice a su productora para aterrizar los helicópteros en el archipiélago. Según el periódico The Telegraph, las autoridades habrían rechazado hasta en 30 ocasiones el permiso para aterrizar sobre el territorio esgrimiendo que eso podría afectar a la fauna local. Esta decisión le impide a la productora PolarX llevar a cabo el rodaje en esta zona, que se encuentra a 600 kilómetros del Polo Norte.

La líder medioambiental de Svalbard, Kristin Heggelund ha emitido un comunicado en el que afirma que el objetivo es “preservar un entorno prácticamente intacto en Svalbard”. “Todo paso por Svalbard se realizará de forma que no provoque molestias innecesarias a personas o animales”, expresa en el comunicado. De esta manera la estrella de Hollywood deberá seguir buscando localizaciones espectaculares para su película sin perturbar la paz de los osos polares.

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Precisamente, y según informaba el medio Entertainment Tonight, el actor no acudió a la gala de los Oscars, donde su película Top Gun: Maverick estaba nominada a seis premios, producto de que se encuentra actualmente en el Reino Unido rodando la nueva entrega de Misión Imposible.