La nueva comedia romántica de Netflix, Nadie quiere esto, ya ha capturado la atención de los espectadores, pero la gran pregunta es: ¿estamos ante el comienzo de algo más grande?
La serie, creada por Erin Foster y basada en su propia experiencia, sigue a Joanne, una podcaster agnóstica interpretada por Kristen Bell, y su inesperado romance con Noah, un rabino poco convencional interpretado por Adam Brody.
Ver esta publicación en Instagram
La relación entre estos dos personajes se ha convertido en la favorita en internet, explorando temas tabú como las diferencias religiosas, algo que rara vez se toca en las comedias románticas.
Con una premisa divertida y abierta, la serie rápidamente mostró potencial para una segunda temporada. Desde su estreno, tanto la crítica como los fans han mostrado su entusiasmo, y el desenlace dejó más preguntas que respuestas.
Ver esta publicación en Instagram
Así que, la posibilidad de continuar la historia de Joanne y Noah parece más cercana que nunca. Aunque, por el momento, Netflix no ha confirmado la renovación de la serie, todo indica que las conversaciones ya están en marcha.
La creadora de la serie, Erin Foster, habló sobre una posible segunda temporada. En una reciente declaración, Foster confesó: “Estamos recibiendo una respuesta muy positiva”.
“Creo que las conversaciones definitivamente han comenzado sobre una posible segunda temporada. La historia en la primera temporada se desarrolla muy lentamente”, señaló.
“Así que, si hay una segunda temporada, me gustaría retomar donde lo dejamos y continuar con ese ritmo lento, porque no quiero adelantarnos demasiado. ¡Quiero que mi programa esté en el aire el mayor tiempo posible!“.
A pesar de la buena recepción de la serie, Netflix tiende a tomarse su tiempo antes de confirmar segundas temporadas. Incluso los éxitos más obvios no siempre son garantía de renovación inmediata.
Sin embargo, con el entusiasmo de Foster y el apoyo de los fans, parece que la segunda temporada está lejos de ser descartada. Lo que queda claro es que la historia de Joanne y Noah no ha terminado.
Ver esta publicación en Instagram
La primera temporada dejó a la pareja en una situación inestable, y todavía hay mucho sin resolver. La decisión de Joanne de no convertirse al judaísmo sigue siendo un punto conflictivo, y las tensiones familiares darán mucho de qué hablar.
Por ahora, la serie sigue en el limbo hasta que Netflix decida su futuro, pero si el éxito inicial de Nadie quiere esto es un indicador, esta historia de amor atípica podría estar solo comenzando.