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Shakira ha puesto fin a su silencio luego de la ruptura con Gerard Piqué. La artista colombiana ha concedido una entrevista a la revista Elle para hablar sobre un nuevo disco. Pero también ha abordado en extenso su ruptura con el padre de sus hijos y su situación con el ministerio de Hacienda español.
Para la cantante, escribir música es como ir al psiquiatra. Además, cuenta que así maneja y procesa sus emociones, porque le ayuda a darles sentido. Por eso se encuentra en un muy buen momento creativo. Y aunque reconoce que el álbum estaba terminado antes de vivir “una de las horas más difíciles y oscuras de mi vida”, revela que cada vez que entra en el estudio termina con música nueva.
Sobre la ruptura con el jugador del Barcelona, cuenta que sobrellevar la atención mediática ha sido difícil. Tiene paparazzis instalados las 24 horas afuera de las puertas de su casa, los siete días de la semana, y que por esto “nuestra separación no ha como una separación normal”.
Al preguntarle por su posible mudanza a Miami, pide tiempo y privacidad para resolver sus problemas. El mismo respeto y intimidad que exige cuando se le pregunta por los motivos que rodearon su ruptura con el futbolista. “Es tan crudo y reciente”, dice. Aunque asegura que por encima de todo están sus hijos y que “independientemente de cómo terminaron las cosas o cómo nos sentimos Gerard y yo como ex pareja, él es el padre de mis hijos”, asegura.
“Solo puedo decir que puse todo lo que tenía en esta relación y en mi familia”, añade la artista. En cuanto a sus problemas con el fisco español se muestra muy segura de los tiempos en los que debía pagar impuestos en territorio español y acusa a Hacienda de perpetrar una “campaña de prensa lasciva para tratar de influir en las personas y ejercer presión en los medios junto con la amenaza de daños a la reputación para forzar acuerdos de conciliación”.
Sobre los años en los que ya mantenía una relación consolidada con Piqué pero todavía no había fijado su residencia en España, asegura que cuando tuvo a su primer hijo, sus compromisos profesionales le obligaban a tener una vida nómade, “Incluso durante los siguientes años estuve viajando por el mundo, trabajando sin parar mientras estaba embarazada o con Milan cuando era bebé, cuando aún estaba cicatrizando mi cesárea”.
