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Si no fuese por Meryl Streep y Amy Adams que en 2009 protagonizaron Julie and Julia, las nuevas generaciones no se hubiesen enterado quién era Julia Child, una de las chefs televisivas más exitosas del mundo y que instaló un modelo de programas de televisión que luego fueron replicados en todo el mundo.
En el caso de Julia Child, su presencia en la televisión norteamericana marcó un antes y un después. The French Chef, su espacio televisivo, introdujo la gastronomía francesa al público estadounidense, y se convirtió en figura nacional. Portada de revistas y autora de voluminosos libros de recetas los que, a partir de la película de Meryl Streep, se volvieron a publicar, traducidos en varios idiomas, y que fueron top en ventas incluso en Chile hace algunos años.
Pero pasada más de una década de la película, los creativos audiovisuales decidieron volver a ficcionalizar la vida de esta figura de la gastronomía y los medios. La idea de una serie de televisión significaba poder enfocarse más en su vida, y contar pormenores más detallados de su trayectoria profesional. Julia llegó sin hacer mucho ruido a HBO Max. Esta vez la encargada de personificar a la cocinera de voz cantarina sería la famosa actriz británica Sarah Lancashire. Una primera temporada que la tuvo nominada a los premios Bafta y al del Sindicato de Guionistas.
Julia es una pequeña pieza de cámara cuyos capítulos están llenos de encanto y amabilidad, un poco como lo fue su protagonista para muchos de sus fieles televidentes durante sus años de éxito. Acompañada por David Hyde Pierce (Frasier) y durante esta nueva y segunda temporada por la icónica Isabella Rosselini.
Respecto a abordar al personaje de Julia Child en una serie de televisión, sus creadores expresaron que: “fuimos bastante suertudos, en el sentido de que la vida de Julia ha sido muy bien documentada. Ella escribió su propia biografía y un montón de otros escritos acerca de ella y su cocina francesa. Tuvimos mucho material desde donde partir. Pero sobre todo, la amamos. Quisimos crear un retrato tridimensional de ella donde se demuestre el amor que sentimos por esta mujer tan inspiradora”.
Pero como en toda ficción, la intimidad tuvo que abordarse desde el espacio de la creación. Por ejemplo, los momentos de soledad con su pareja, las charlas con su mejor amiga y sus momentos de intimidad. Todo en coherencia con la personalidad de la propia Julia Child. Julia, la serie, tendrá solo dos temporadas y es una brisa de aire fresco ideal para estas noches de verano.
