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Como parte de sus actividades públicas, el príncipe William asistió a la tradicional fiesta en el jardín de Buckingham, instancia a la que nuevamente asistió en solitario. Y aunque en todo evento donde va, el príncipe de Gales recibe saludos y le preguntan sobre el estado de Kate, esta vez William quiso hablar sobre uno de sus hijos, quien le seguirá en la sucesión al trono: el príncipe George.
Y es que si bien ahora estamos en Carlos III, luego será William, irremediablemente quien lleve la corona real será George, lo que genera mucha expectación respecto a su futuro académico y profesional.
Todo esto porque muchos expertos en la realeza esperan que el niño, quien hoy tiene 11 años de edad, siga obedientemente todos los pasos que ha dado su padre. Pero William, quién antes de príncipe y futuro rey es padre, habló sin poco orgullo de las intenciones de George respecto a su futuro profesional. Y lo cierto es que sus palabras no dejaron lugar a ninguna duda.
William reveló que lo más probable es que George siga su ejemplo y que en un futuro próximo se una a la Fuerza Aérea Real. “George es un futuro piloto en ciernes”, declaró William en una breve conversación que sostuvo con la jefa de escuadrón Chrissie Lacey, miembro de la Royal Air Force que trabaja en la base de Coningsby, en Lincolnshire.
De esta manera nos hemos enterado de cuáles son los intereses del futuro heredero, quien en ocasiones anteriores ha mostrado una fuerte atracción por los aviones. Esto, a partir que en julio del año pasado, William y Kate asistieron junto a sus tres hijos a la feria más grande dedicada a la aviación en el mundo, la Royal International Air Tattoo, con sede en Gloucester. Un evento donde exhiben grandes aviones militares, y donde George, quien solo tenía 9 años, le pidió al comandante Will Essex asesoramiento para pilotear.
Además, este fin de semana asistió a la final de la FA Cup en Wembley, Londres, el campeonato de fútbol más antiguo de fútbol. Y en el partido entre el Manchester United y el Manchester City, donde el primero se quedó con la copa, la copa y medallas fueron entregadas por el príncipe William y el príncipe George.
