Si sientes que en esta época el pelo se te cae más de lo normal, lo cierto es que es real. Sin embargo, los expertos aseguran que se trata de un “recambio”. Además, explican que el cambio climático influye en esta caída natural. ¿Qué hacer para prevenirlo?
Así como se caen las hojas de los árboles o los animales cambia de pelaje, el pelo humano también se ve afectado por la llegada del otoño. Y esto forma parte precisamente de nuestra herencia animal. Eso sí, los especialistas destacan que se trata de un proceso normal de renovación del pelo. Y aseguran que luego de unos meses vuelve a crecer, sin la necesidad de vitaminas o productos anticaída.
Los expertos también aclaran que hay épocas en que este “recambio” es más notorio que en otras, y que es progresivo. Al contrario de muchas especies animales que hacen el cambio de una sola vez y de forma evidente. En esta época además, el cabello se ve afectado naturalmente por la falta de luz y los cambios de temperatura.
Ahora bien, tenemos que tener en cuenta que de cada 100 pelos que tenemos, siempre hay un 12-15% en fase de recambio. Esto significa que deben pasar unos cuatro años para renovar la cabellera de forma completa.
Esta caída es similar para todos, menos para los recién nacidos. A los tres o cuatro meses, ellos pierden casi toda la pelusa inicial que cubre su cabeza y aparece el pelo nuevo. Desde ahí, ocurrirá el proceso aleatorio de por vida.
Eso sí, que esta pérdida de cabello sea más evidente en otoño tiene que ver con el ciclo de nacimiento y crecimiento del pelo. El que, por lo general, muere en primavera, y suele tardar unos tres meses en caerse. Eso sí, así como hay cabello que muere, hay nuevo empujando.
Pero los expertos aseguran que, en los últimos años, debido al cambio climático, esta muda se ha adelantado un poco.
Si hay algo en lo que los especialistas insisten, es en que ese pelo que perdemos en otoño se recupera y reaparecerá al cabo de tres o cuatro meses. Sin la necesidad de tomar algún suplemento. Y coinciden en que al menos 8 de cada 10 personas no tiene una enfermedad, solo se asusten ante la repentina caída.
Además, aclaran que el fenómeno no es exclusivamente femenino, pero que en el caso de las mujeres se nota más ya que tienen el pelo más largo.
Por último, son claros al explicar que no tiene que ver con cómo te cepillas o los peinados que usas. La raíz del pelo está a medio centímetro de profundidad por debajo de la piel, por lo que los que se caen fácilmente es porque están en fase de renovación. Y no tiene nada que ver con la forma y periodicidad con la que te lavas el cabello.
Dentro de los consejos que entregan, se encuentran llevar una dieta rica en vitaminas y minerales, así como evitar el estrés.
Perdemos aproximadamente entre 100-150 pelos al día, y que encontremos pelo en la almohada, en el cepillo o en la ducha es normal debido a que el proceso de crecimiento del cabello es cíclico y alterna periodos de crecimiento con periodos de caída. El problema es cuando el recambio es muy acelerado y perdemos más pelo del que regeneramos.