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En muchas ocasiones, cuando se quieren bajar ese par de kilos demás, se recurre al metabolismo. Pero así como buscar aquellas cosas que lo aceleran, es clave detectar aquello que impide lograrlo. Por ende, ciertas rutinas del día a día te impiden adelgazar como querías.
Los expertos dicen que si estás buscando acelerar el metabolismo, una de las primeras cosas que debes hacer es precisamente lo contrario. Mantener el metabolismo alto es esencial para perder peso y no recuperarlo, pero es fácil cometer errores que impiden lograrlo y lo ralentizan.
Comer muy pocas calorías puede ralentizar el metabolismo. Si bien se recomienda un déficit de calorías para perder peso, una baja ingesta calórica puede ser, al mismo tiempo, contraproducente. Cuando reduces drásticamente la ingesta de calorías, tu cuerpo asume que la comida escasea y reduce la velocidad con la que quema calorías. Es como si entrara en modo supervivencia. Es más, estudios en personas delgadas y con sobrepeso confirman que consumir menos de 1.000 calorías por día puede tener un impacto significativo en la tasa metabólica.
Comer suficientes proteínas es muy importante para lograr y mantener un peso saludable. Además de ayudarte a sentirte llena, la ingesta alta de proteínas puede aumentar significativamente la velocidad a la que tu cuerpo quema calorías. Los estudios coinciden en que comer proteínas aumenta temporalmente el metabolismo en un 20-30 % en comparación con el 5-10% de los carbohidratos y el 3% o menos en el caso de las grasas. Si bien la tasa metabólica inevitablemente se ralentiza durante la pérdida de peso y es más lenta durante el mantenimiento, la evidencia sugiere que una mayor ingesta de proteínas puede ayudar a minimizar este efecto.
Ser sedentario puede afectar la cantidad de calorías que quemas todos los días. Muchas personas tienen estilos de vida que implican pasar sentadas muchas horas, lo que puede tener efectos negativos en la tasa metabólica y en la salud en general. Hacer ejercicio puede tener un gran impacto en la cantidad de calorías que quema, incluso actividades físicas básicas como ponerse de pie, hacer las tareas de la casa o subir escaleras.
El sueño es muy importante para una buena salud y está demostrado que dormir menos horas de las que necesitas puede aumentar el riesgo de una serie de enfermedades, entre ellas, cardíacas, diabetes y depresión. Varios estudios señalan que el sueño inadecuado también puede reducir tu tasa metabólica y aumentar su probabilidad de aumento de peso. Por otro lado, la falta de sueño empeora al dormir durante el día, porque este patrón de sueño interrumpe el reloj interno de tu cuerpo.
Las bebidas azucaradas son perjudiciales para la salud. Y el alto consumo de ellas, está relacionado con varias condiciones la resistencia a la insulina, la diabetes y la obesidad. El consumo frecuente de bebidas azucaradas puede ralentizar el metabolismo, y el efecto negativo se atribuye a la fructosa que contienen. Las investigaciones muestran que el consumo excesivo de fructosa también promueve un mayor almacenamiento de grasa en el vientre y el hígado.
