En mayo del 2017, Pippa Middleton, hermana menor de Kate Middleton contrajo matrimonio con James Matthews en la iglesia de San Marcos, en Berkshire. Ahora, están a poco de celebrar seis años y un pequeño detalle ha salido a la luz.
Entre los 130 invitados, que por supuesto incluía a los Duques de Cambridge y al príncipe Harry con su en ese entonces prometida, Meghan Markle, muchos se preguntaron por qué la joven pareja no había podido sentarse juntos durante la ceremonia.
Ahora, según afirma el Mirror, en el banquete nupcial una «extraña regla impidió que la ex actriz se sentara junto a ‘su’ príncipe», ya que la hermana menor de la duquesa tuvo una idea inusual para la disposición de los asientos.
Tras la ceremonia, todos los asistentes se trasladaron hasta Bucklebury Village Hall, en la hacienda de los padres de la novia. Y allí, disfrutaron de una serie de juegos e incluso un espectáculo de luces antes de que pasaran a servirse el banquete.
Sin embargo, al momento de tomar asiento, descubrieron que Pippa había establecido una regla que sí o sí debía respetarse, y es que nadie debía sentarse junto a su “media naranja” durante la comida.
Así, a pesar de que Meghan había viajado más de 3.000 kilómetros tuvo que respetar la medida, lo que habría sido su segunda decepción del día, ya que tampoco fue invitada a la ceremonia religiosa.
Esto, debido a que la novia temía que debido a la atención mediática que estaban recibiendo Harry y Markle, eclipsaran su día especial. Según reveló Finding Freedom, la ex duquesa incluso habría comprado un vestido especial para llevar en la iglesia, convencida de que sería invitada.