Así como nuestra piel necesita de limpieza profunda, el cuero cabelludo también. No basta con solo lavar el pelo, hay impurezas, restos de productos, polución y grasa que requiere de un cuidado especial.

Para los expertos es un básico que no solo mantendrá el pelo limpio por más tiempos, sino que además controla los niveles de grasitud. De ahí que recomienden realizarse una exfoliación una o dos veces al mes.

Sin ninguna contraindicación más que la posible alergia a algún componente del producto o un cuero cabelludo muy sensible, pero no tiene relación alguna con la caída del pelo o la calidad de este.

Ayuda a la oxigenación del folículo piloso y a eliminar las células muertas, lo que se traduce en un cabello más sano y brillante.

Exfoliante capilar Glow Dry de Redken

Previo al champú, este producto está pensado para eliminar toda impureza y potenciar el brillo. Sirve para todo tipo de cabello, incluso tinturado, y su fórmula gloss hidratada prepara el pelo para el lavado.

Mascarilla exfoliante Everfresh de L’Oréal

Si fórmula remueve impurezas, escamas y la acumulación de suciedad y aceites en exceso. Se aplica con el cabello húmedo y un suave masaje. Luego se retira y se complementa con el lavado.

Exfoliante capilar Soin Gommage-Rénovateur Chronolgiste de Kérastase

Trata el cabello desvitalizado previo a la rutina de baño. Su función es purificar el cuero cabelludo dando como resultado pelo desintoxicado y con una inyección revitalizadora. Además, aumenta la efectividad del champú.

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