A casi un año de recibir uno de los diagnósticos más duros de su vida, Paulina Urrutia rompió el silencio. La reconocida actriz y exministra de Cultura enfrentó públicamente, por primera vez, el proceso que ha vivido desde que le detectaron cáncer de mama triple negativo, uno de los tipos más agresivos de esta enfermedad.
“Hacia enero de 2024, el dolor se me hizo permanente en la pechuga izquierda. Eran dos tumores, pero juntos se veían como una masa tumoral importante en la ecotomografía. Y, por lo tanto, chuta, ¡quimioterapia! La vida, de un año para otro, me cambió“, contó a Revista Ya. El testimonio, directo y honesto, da cuenta del impacto que tuvo el diagnóstico en su cotidianidad, en su cuerpo y, especialmente, en su identidad como actriz.
<
Ver esta publicación en Instagram
El complicado viaje de Paulina
El tratamiento inicial no tuvo los resultados esperados: nuevos tumores aparecieron, uno incluso comprometió un ganglio en su brazo izquierdo. En medio del tratamiento, la caída emocional fue inevitable. “Lloré como una niña, encerrada y muerta de calor. Imagínate, estaba pelada, hinchada, sin poder trabajar”, relató, reconociendo que el golpe más fuerte no fue solo físico, sino emocional y profesional.
“Uno se siente absolutamente liquidado, ¡cómo no iba a llorar!”, confesó. Pero fue la posibilidad de volverse “públicamente vulnerable” lo que más le asustó. “Dije: ‘Esto se va a saber y voy a aparecer en la portada de un diario y será la peor foto de mi vida, me voy a ver horrible. Y abajo, un titular: Paulina, cada vez más cerca de la muerte’“, recordó.
En marzo de este año, Urrutia fue sometida a una mastectomía total. Sin embargo, la biopsia reveló la necesidad de una segunda intervención para remover más tejido comprometido. Actualmente, lleva expansores en el pecho como parte del proceso de reconstrucción mamaria y continúa con quimioterapia oral, la que se extenderá por 12 meses.
Pese a lo duro del camino, su visión sobre la vida, y la muerte, es conmovedora. “Estoy entregada a lo que pase, y a que las cosas pueden funcionar. Y si funcionan, será maravilloso y tendré otra vida, una segunda. Pero si no resultan… he tenido una existencia plena y ¡a concho!“, declaró con la misma firmeza con la que ha enfrentado cada escenario de su carrera.