Uno de los espectáculos deportivos más esperados del año está por comenzar. Este viernes 26 de julio se inauguran los Juegos Olímpicos de París 2024. El más grande de los eventos deportivos multidisciplinarios y que se se llevan a cabo desde el 5 de abril de 1896.
Desde ese momento que muchas más personas le tomaron el peso a estas competencias que cada edición van sumando nuevos deportes y actividades. Haciendo que la exigencia se siempre aún mayor y que el arco de disciplinas que comprende se extienda acorde a los tiempos que corren.
Lo que hace aún más atractivo el show de este año, es la ciudad que hará de telón de fondo. París será la sede que albergará todas las competiciones. Una ciudad que además cumple un centenario desde que se realizaron en aquella misma ciudad. Pero hay muchos detalles en la historia de este evento, que muchos desconocen. Símbolos e íconos que hemos visto desde siempre pero que desconocemos su origen. Es el caso de las clásicas argollas de colores y que tienen una muy notable explicación, incluso desde su número.
Lo cierto es que en cada versión de los Juegos Olímpicos, es el planeta y la humanidad entera quienes vibran con el esfuerzo, la motivación y la alegría del deporte y sus atletas. Es un evento de tal magnitud, que representar a un país se convierte en un honor gigantesco. Fue por esto que se decidió darle un simbolismo inventando lo que se convertiría en el logo y la bandera de los J.J.O.O. Estamos hablando de las argollas olímpicas, las cuales son cinco y tienen distinto color.
Estas fueron inventadas en 1914 por Pierre de Coubertin, quien quiso que cada país y continente se vieran representados. Para esto puso cinco argollas entrelazadas, que representan a los cinco continentes del mundo (América, Europa, Oceanía, Asía y África). En cuanto a los colores, quiso poner el Rojo, Verde, Azul, Amarillo y Negro, para incluir por lo menos un color que contenga cada bandera.