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Por Manuela Pérez
En medio del estallido social que enfrenta Estados Unidos, Donald Trump se tomó el tiempo para posar junto a su esposa Melania. Al notar que se encontraba con su característica “poker face” le pidió que “por favor, sonriera”. Y la reacción de la primera dama enloqueció a las redes sociales. Pero, ¿qué hay detrás de la sonrisa de Melania o de la falta de esta?
My Admin has done more for the Black Community than any President since Abraham Lincoln. Passed Opportunity Zones with @SenatorTimScott, guaranteed funding for HBCU’s, School Choice, passed Criminal Justice Reform, lowest Black unemployment, poverty, and crime rates in history…
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) June 2, 2020
El día martes la pareja visitó el santuario nacional Juan Pablo II en Washington y, como es habitual en los eventos oficiales, llegó el momento de las fotos. Frente a millones de cámaras, y por medio segundo, Melania sonrió a pedido del magnate.
Pero esta no es la primera vez sus sonrisas son tema en redes sociales. Cómo olvidar el día en que su esposo tomó el mando presidencial. En un minuto de la ceremonia, Trump se da vuelta para compartir su felicidad con su familia. ¡Y ahí la tenemos! Melania en un traje celeste fuerza una sonrisa de oreja a oreja ante la atenta mirada de su marido, pero en cuanto se da vuelta su expresión cambia por completo. Esa escena desencadenó el #FreeMelania.
Estos memes y virales sumados a que es considerada una de las primeras damas más silenciosas y enigmáticas de la historia de EEUU, han hecho que las redes ardan en teorías acerca de su felicidad. Llegando a leer de todo: desde que tiene una doble hasta que está atrapada en la Casa Blanca.
Cuando en el 2017 corría el rumor que Melanina no quería aceptar su trabajo ni irse a vivir a la Casa Blanca, la investigadora fotográfica Kate Imbach, analizó las 470 fotos publicadas en el twitter de la ex modelo en un periodo de tres años (entre el 3 de junio del 2012 y el 11 de junio del 2015, justo antes del cambio de mando).
Para Imbach, Melania es “una Rapunzel sin príncipe ni trenza, encerrada en una torre por su propia voluntad, encantada con lo predecible que es su vida y la repetición de su propia cautividad”. Y agrega “es la mujer menos apta para el servicio público en todos los Estados Unidos de América. No debemos esperar nada de ella. Ella vive dentro de un oscuro cuento de hadas, y en los cuentos de hadas las mujeres atrapadas en las torres nunca salvan a nadie más que a ellas mismas.”
Por otra parte, la periodista de CNN, Kate Bennett, autora de libro ‘Free, Melania: The Unauthorized Biography’ (2019), afirma que la seriedad de su rostro se debe probablemente a sus raíces eslavas. “La mayor parte de la gente no entiende la cultura de Melania y del país donde nació. En Eslovenia, una sonrisa no genuina no es realmente una cosa”.
Hasta que Melania Trump no se refiera al tema, no tendremos la seguridad si es una doble o no está a gusto con su vida. Pero sí sabemos que, a través del lente, rara vez la vemos contenta y que su relación de pareja está llena de momentos incómodos.
