El día en que Steve Jobs presentó el MacBook Air en 2008, es definitivamente una de las presentaciones de Apple que jamás olvidaremos. Jobs lo sacó del sobre amarillo y de inmediato conquistó a los usuarios que prefieren el minimalismo, la elegancia y la portabilidad, antes que los caballos de fuerza.

Si bien es uno de los productos más olvidados de la marca en cuanto a actualizaciones, este año el MacBook Air M2 rindió honores a su historia, y se ha superado a sí mismo. Y cuando creíamos que no podía hacerse más pequeño y liviano, el nuevo integrante de la familia lo logra con crecer. E incluso ha agrandado su pantalla. ¿Es eso posible? Claro que sí.

A continuación, te contaremos algunas de las cosas que más nos han sorprendido de este MacBook Air, y las que lo convierten en una joya discreta, atractiva y liviana. Eso sí, desde un punto de vista de usuario de este tipo de computador portátil en específico. Es decir, analizar si reúne los pro suficientes para que se convierta en tu alma gemela portátil. 

Veloz y poderoso. Esto, gracias a los superpoderes del chip M2, el cual supera al M1 en velocidad, su rendimiento es hasta 15 veces mejor y es propio de Apple. Y esto lo combina con una gran eficiencia energética y una batería de hasta 18 horas. Algo que, puedo corroborar como real. La duración es increíblemente mayor, sobre todo si trabajas todo el día con el computador encendido, y se carga muy rápido. Ideal para quienes nos movemos con el MacBook Air a todas partes. Y en el que podrás abrir, reproducir y editar, todos los videos que quieras. Sobre lo mismo, sus 8 GB de memoria RAM son suficientes.

Compromiso con el planeta. La carcasa está hecha de aluminio 100% reciclado. Además, es resistente e increíblemente delgada, pesando tan solo 1,24 kg y tiene 1,13 cm de grosor. Es un 20% más pequeño que el anterior.

Silencioso. Así como sigue la línea minimalista y elegante, cuando se trata de ruido, lo único que sentiremos será el poder de su sistema de cuatro parlantes con audio espacial. Y es que ni el teclado se siente. Su Magic Keyboard es cómodo y silencioso. Además, viene con Touch ID, para que desbloquees tu Mac e ingreses tus contraseñas fácilmente con un solo toque, y un trackpad Force Touch más grande, que te da más espacio y precisión. Por si fuera poco, no trae ventilador, ya que la eficiencia del chip M2 es tal, que no necesita nada más.

Es lindo por donde lo mires. Su nuevo diseño incluye una pantalla Liquid Retina de 13,6 pulgadas compatible con 1.000 millones de colores. Es la más grande y deslumbrante usada hasta ahora en un MacBook Air, y no tiene borde, como el último iPhone. Pantalla completa, literal. El texto, las fotos y películas se ven más nítidas, brillantes y vívidas, con un profundo contraste y un increíble nivel de detalle.

Tú también te verás increíble. En cuanto a las llamadas de video, gracias al sistema de tres micrófonos y la cámara FaceTime HD de 1080p, el home office no será problema y nunca más apagarás la cámara. La resolución y calidad es evidente y adictiva.

El MacBook Air viene con un conector de corriente MagSafe con imanes. Trae dos puertos Thunderbolt para conectar y cargar accesorios de alta velocidad, o conectar un monitor de hasta 6K. Además, la entrada para audífonos es compatible con audífonos de alta impedancia.

Detalles coloridos. El MacBook Air viene en cuatro acabados increíbles: Gris especial, color plata, blanco estelar y color media noche. Y cada uno combina a la perfección con un cable de carga MagSafe del mismo color.

En resumen, el MacBook Air M2 es un ordenador que encanta a quienes amamos la línea Air. En mi caso, fue amor a primera vista, y a eso debemos agregarle la última actualización de macOS. Internamente, ha facilitado el espacio de trabajo, transforma archivos en diferentes formatos de forma rápida y sencilla, y se puede trabajar en diferentes ventanas al mismo tiempo.

Y, por supuesto, integra todos tus aparatos Apple. Es más, da la posibilidad de desbloquear el computador desde el Apple Watch hasta contestar llamadas del iPhone desde el MacBook o utilizar un iPad como segunda pantalla. Es un aparato fácil y agradable de usar, y es útil tanto para trabajar, como comunicarse o entretenerse.