La temporada de premios continúa y los SAG Awards 2025 llegaron para recordarnos que la moda es tanto un protagonista como los propios premios. Desde looks de archivo hasta apuestas vanguardistas, la alfombra roja de Los Ángeles brilló.
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Si algo dejó claro esta edición es que los SAG Awards no son solo una antesala a los Oscar, sino un evento con identidad propia. Danielle Deadwyler fue una de las más aplaudidas con su vestido rojo de Louis Vuitton, una pieza escultural y de capas que capturó todas las miradas.
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En la misma línea de impacto, Cynthia Erivo optó por un vestido plateado de archivo de Givenchy, perteneciente a la colección otoño 1997. Y diseñado por el icónico Alexander McQueen.
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“El vestido plateado de rafia trenzada con cuello y mangas de flecos se sintió tan fresco y moderno como en su debut”, destacaron los expertos en moda. A su lado, su coestrella en Wicked, Ariana Grande, llevó un vestido rosa hecho a medida por Loewe, con un aire romántico que evocaba el espíritu de Glinda.
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Más allá del glamour, la sustentabilidad también tuvo su espacio en la alfombra roja. Lily Gladstone decidió reutilizar el vestido que llevó en la fiesta post-Oscar del año pasado. Un diseño personalizado de Gucci con un intrincado trabajo de plumas creado por el artista indígena Joe Big Mountain.
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En el terreno de la moda masculina, los riesgos y la creatividad fueron la norma. Colman Domingo, siempre impecable, apostó por un blazer crema de Valentino que inspiraba elegancia.
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Mientras que Timothée Chalamet, fiel a su estilo audaz, lució un traje de cuero con inspiración western firmado por Chrome Hearts, complementado con una camisa neón y un bolo tie.
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Pero fue Luke Newton, estrella de Bridgerton, quien se llevó los aplausos por el accesorio más significativo de la noche. Un broche con los símbolos masculino y femenino entrelazados, un emblema frecuentemente asociado con la comunidad trans. “Fue un gesto sutil de solidaridad que brilló con luz propia”, señalaron en redes sociales.
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