Los coffe table books son preciosos. Yo tengo varios. Uno sobre las vitrinas de Louis Vuitton, otro especialmente dedicado y autografiado por Mario Toral, uno con las mejores imágenes de la historia Argentina del Siglo XX, uno de Moda y Rock & Roll, el de los Facsimiles de Helmut Newton, el primer libro de ilustraciones de mi querido Manuel Santelices, y varios más. Siempre los veo, los miro, los hojeo, alguna vez los he leído. 

Pero mi rincón de lectura no es precisamente instagrameable. Es una biblioteca llena de textos desordenados que en su gran mayoría trajimos de Buenos Aires. Hay de moda, historia, economía, novelas policiales, mucha historia, clásicos de la literatura argentina, harta poesía, unos cuantos de fútbol, música…  Ahora resulta que los libros se han transformado en una nueva tendencia en redes sociales. Y no solamente porque son “lindos”, sino porque personalidades del mundo de la moda como Kaia Gerber o Kendall Jenner han aprovechado la cuarentena para mostrar los suyos, y las ventas se dispararon.

Según la revista W la hermana de Kim Kardashian es además de modelo una auténtica book influencer, ya que cada vez que muestra un libro en redes sociales, simplemente se agota. Pero no es la única. Reese witherspoon se autodenomina lectora imparable, y hasta abrió un club virtual donde recomienda libros de puras autoras mujeres, junto con una crítica para que su audiencia comente.

Otro ejemplo es Kaia Gerber, la famosa hija de Cindy Crawford, quien confesó haberse leído 18 libros durante la cuarentena, y también participa de un club de lectura. O Gwyneth Paltrow, quien actualmente disfruta la lectura de Always Home, de Fanny Singer, y también lo comparte a través de Instagram.