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Todo parece indicar que los duques de Cambridge están a punto de comenzar un nuevo capítulo de sus vidas, motivados como siempre desde el amor y el compromiso a la familia y el trono.
Fuentes cercanas han asegurado que el príncipe William y Kate Middleton se estarían planteando la posibilidad de dejar el Palacio de Kensington, para acercarse a la Reina Isabel II, quien se asentó hace algunas semanas en Windsor.
Junto al príncipe George, la princesa Charlotte y el príncipe Louis, los duques incluso ya estarían buscando nuevos colegios para sus hijos, tomando en consideración lugares como Ascot, Buckinghamshire, Windsor y Surrey.
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Pero además de la educación, otro incluso más importante detalle también se está empezando a conversar entre el matrimonio: la nueva residencia de los Cambridge. Y por ahora, la familia cuenta con varias opciones.
Una de ellas es Fort Belvedere, un inmueble perteneciente a la Corona, donde vive la familia multimillonaria Westonno. Y cuya característica más relevante es que estaría ubicado en Windsor Great Park, a escasos metros del castillo, muy cerca de Isabel II.
Y eso no sería todo, ya que el lugar además cuenta con su propio bosque y un lago, además de tener una piscina privada, pista de tenis y establos. El lugar ideal para los Cambridge, quienes disfrutan las actividades al aire libre, e incluso las promueven constantemente en su crianza.
Otra de las propiedades que podrían elegir los duques de Cambridge como nueva residencia es Frogmore Cottage, donde vivieron los duques de Sussex hasta su traslado a Estados Unidos, y en la que incluso invirtieron más de dos millones de euros en renovaciones.
Por otro lado, también se encuentra dentro de las posibilidades Adelaide Cottage, una casa más moderna, y que alguna vez fue hogar de el capitán Peter Townsend, primer amor de la princesa Margarita y ayudante del rey Jorge VI.
Sea cual sea la decisión final, lo seguro es que la vida de los Cambridge dará un giro importante, que implicará una nueva rutina, pero que sin duda valdrá la pena ya que estarán cerca no solo de la monarca, sino también de los padres de Kate Middleton, Carole y Michael Middleton.
