Pese a que el reinado de los corazones de millones de fanáticos en el mundo lo ocupaban Julia Roberts y Meg Ryan con sus comedias románticas, Demi Moore terminó siendo durante la alocada década de los noventa, la actriz mejor pagada de Hollywood. Víctima de un juicio exagerado por su escultural físico y luego de dos bullados divorcios: con Bruce Willis en 2000 y el de Ashton Kutcher en 2013, y una espiral autodestructiva que terminaría llevándola al hospital y luego ingresada a un centro de desintoxicación, Demi Moore hoy ha manifestado estar “más viva y presente que nunca”, tal como lo dijo recientemente en una entrevista en Revista People. Estos 60 años, la han vuelto a los focos de atención a partir del lanzamiento de su colección de bikinis para la firma Andie Swim, donde ha compartido además su rutina de ejercicios y ganarse las alabanzas de personalidades como Michelle Pfeiffer, Helena Christensen y Lily Collins.
Los 60 años encuentran a Demi felizmente acompañada con el chef suizo Daniel Humm, con quien comparte su vida desde casi un año y acompañando de forma férrea y cariñosa a su ex Bruce Willis, quien sufre de afasia y que por este motivo lo llevó a retirarse de su carrera cinematográfica. En lo profesional, veremos a Demi Moore nuevamente en pantalla y será en uno de los proyectos televisivos más esperados. Se trata de la continuación de la serie antológica Feud, creada por el rey midas de la televisión norteamericana, Ryan Murphy y que en esta oportunidad narrará la relación de amor y destrucción del escritor Truman Capote, con las que él llamaba sus “cisnes”. Esas mujeres de la alta sociedad norteamericana que le confiaban todas sus intimidades y que el polémico escritor terminó difundiendo en su libro Plegarias Atendidas. Demi Moore interpretará a una de estas mujeres, dentro de un abanico de actrices que contempla a Jean Smart (Hacks), Catherine O’Hara (Schitt’s Creek), Jane Fonda (Grace & Frankie) y Jessica Lange (American Horror Story). Un proyecto que podremos ver en 2023 al aire.
Mientras tanto, y a modo de celebrar las seis décadas de la gran Demi Moore, queremos recordar los tres momentos icónicos en la carrera de la actriz:
Embarazada en Vanity Fair
Esperando su segundo embarazo de su matrimonio con el actor Bruce Willis, la actriz protagonizó en agosto de 1991, una portada para no olvidar. Retratada por la célebre Annie Leibovitz, la estrella que brillaba angelical en Ghost aparecía completamente desnuda en la histórica revista y luciendo su estado de gravedad para todo el mundo.
La actriz mejor pagada del mundo
Protagonizaría uno de los mayores fiascos de la década y se convertía a la vez en la mejor pagada de la industria. ¿Cómo lo celebraría? Muy acorde a lo que iba el filme. En Striptease, Demi Moore en escena y en medio de un baile, se sacaría la camisa y dejaría en evidencia un cuerpo escultural, metódicamente trabajado, por el que fue admirada y criticada por partes iguales
La escena inolvidable
La sufriente Demi Moore lloraba desconsolada porque su amado Patrick Swayze había muerto en un accidente y nosotros lloraríamos a la par con ella. Y aun seguimos llorando cuando volvemos a verla. Lo cierto es que Ghost marcó a generaciones. Fue la película romántica por antonomasia, y la clásica escena de ella sentada en el rodamiento para confeccionar cerámica con el fantasma de su amado detrás, es de lo más romántico, triste y sensual que vimos nunca antes.