Es la persona que ostenta todo el poder de la república. Este domingo los chilenos vamos a las urnas a elegir quien nos gobernará durante los próximos cuatro años. Pero hemos querido darle un toque lúdico a estos días un tanto movidos en la contingencia política, para recordar aquellos mandatarios -y algún primer ministro por ahí- memorables que nos ha regalado la ficción cinematográfica y televisiva. Algunos ejemplos de bondad y nobleza. Otros heroicos y valientes. Y los hay algunos oscuros y maquiavélicos. Lo cierto es que en la pantalla han tenido que enfrentar asteroides en dirección a la Tierra, tragedias personales, invasiones extraterrestres, ataques terroristas, intentos de asesinatos, secuestros en el aire, difamaciones y, por qué no, también enamoramientos. Porque al fin y al cabo, son seres humanos igual que tú y que yo. Estos son algunos de los presidentes más inolvidables que han pasado por el cine y la televisión.

John Travolta: Primary Colors

A pesar de que el presidente de la película se apellidaba Stanton, no hay mucho que mirar en la foto para darse cuenta de que su director Mike Nichols, de quien en realidad quería hablar era de Bill Clinton. De hecho, la película se inspira en el libro de su primera campaña presidencial. El filme de 1998 está protagonizado por John Travolta en un trabajo de caracterización notable, interpretando a un gobernador del sur de los Estados Unidos que hace lo que está a su alcance para escalar hacia la Casa Blanca, sorteando numerosas acusaciones en el camino, como por ejemplo, su fama de mujeriego. Un presidente carismático pero no libre de defectos. Como lo fue el propio Bill. Su esposa, Susan, fue interpretada por Emma Thompson.

Hugh Grant: Love Actually

“Un amigo que abusa de nuestro país ya no es un amigo. Y puesto que los abusadores solo reaccionan frente a la fuerza, a partir de ahora estaré dispuesto a ser mucho más fuerte, y el presidente deberá estar preparado”, le decía Hugh Grant como el Primer Ministro del Reino Unido a Billy Bob Thornton, como el presidente de los Estados Unidos en la inevitable y muy navideña Love Actually del 2003. Un primer ministro enamorado, soltero, que celebra sus logros bailando en secreto en su residencia de Downing Street. Todos quisiéramos un mandatario así.

Michael Douglas: The American President

En plena era Clinton, todos los presidentes en la ficción se parecían a su símil de la Casa Blanca. Un poco en espíritu, otros en estética, lo cierto es que Michael Douglas, bastante más alejado de sus roles cargados a la sexualidad que le antecedieron, se viste de primer mandatario de los Estados Unidos y se pone a las órdenes de Rob Reiner, el director de Cuando Harry conoció a Sally, que se encargó de esta fábula romántica donde Douglas, viudo y presentándose a la reelección, se enamora de una activista ecologista encarnada por Annette Bening. En un principio, el papel del Presidente lo interpretaría Robert Redford pero quedó fuera después de pelearse con Reiner.

Bill Pullman: Independence Day

Bill Pullman es, probablemente, el presidente más recordado del cine hollywoodense. Frente a la amenaza extraterrestre que se cierne sobre el mundo, el presidente Thomas J. Whitmore hace de líder indiscutible con un discurso que muchas otras películas han intentado imitar, pero nunca igualar: “El 4 de julio ya no será reconocido como una fiesta norteamericana sino como el día en que el mundo declaró a una voz: no entraremos en silencio hacia la noche, y no moriremos sin pelear. Vamos a vivir, a sobrevivir. Hoy celebraremos nuestro día de la independencia”.

Kevin Spacey: House of Cards

Debe ser el tipo más turbio de todos, también el más teatral pero uno de los más recordados. El hoy por hoy cancelado Kevin Spacey rompió la llamada “cuarta pared” y le habló con total franqueza al espectador. Frank Underwood es la antítesis de lo que debería ser un Presidente honesto. Sin embargo es ese el principal atractivo del personaje. Sin escrúpulos pero siempre con una estrategia en mente, es capaz de hacer cualquier cosa, pero cualquiera, con tal de estar en la cima de todo. Simplemente brillante y aterrador.

Harrison Ford: Air Force One

Que Han Solo sea el Presidente no tiene precio. En Avión Presidencial, Harrison Ford tiene todo lo que un presidente gringo necesita; es un buen líder, sabe pelear y es veterano de guerra. Cuando el terrorista interpretado por Gary Oldman quiere tomar control del avión presidencial, el presidente toma las riendas con buenas dosis de vertiginosa acción traída desde las profundidades (o las alturas, en este caso) de los noventa.

Morgan Freeman: Deep Impact

Un dato: con esta película, Morgan Freeman se convirtió en el tercer presidente afroamericano en el cine. En Impacto Profundo, Freeman como el primer mandatario de los Estados Unidos tiene la misión de decirle al mundo entero que hay que huir del meteorito que se viene acercando a la tierra, porque cuando sea el momento del impacto gran parte de la superficie terrestre quedará bajo el agua. Lo más gracioso de este presidente es que en todo momento hace lo correcto de forma impecable. Sin poner sus intereses por sobre sus gobernados. Quién lo diría.

Peter Sellers: Doctor Strangelove

Peter Sellers hacía los tres grandes papeles de esta magistral película de Stanley Kubrick que data de 1964. El capitán Mandrake, el loco doctor Strangelove y el presidente Merkin Muffley, un personaje un poco tonto, cuyo cargo le queda un poco grande. Al actor británico se le pagó 1 millón de dólares de aquella época, nada menos que el 55% del presupuesto de la película.

Daniel Day Lewis: Lincoln

Daniel Day-Lewis interpreta al decimosexto presidente de los Estados Unidos en un papel que lo llevó a ganar el Oscar a Mejor Actor. Si bien este es el único Presidente en esta lista que está basado en la “vida real”, en la película podemos ver a un hombre de carne y hueso que pareciera ser la viva imagen de Abraham Lincoln, tanto física como mentalmente. El hombre que abolió la esclavitud podría ser el mejor ejemplo para los próximos presidentes, principalmente por la convicción de sus ideas humanitarias.

Jack Nicholson: Mars Attack!

El speech que se manda Jack Nicholson intentando convencer a los marcianos de que “la Tierra y Marte pueden convivir juntos en esta enorme galaxia” es francamente desopilante. Y aunque no le fue muy bien convenciéndolos, al menos se la jugó por el país estrechando la mano con los extraterrestres. En esta sátira maestra dirigida por Tim Burton, pareciera que un grupo de amigos se hubiesen juntado a jugar con efectos especiales y looks retro futuristas con aliens con el cerebro a la vista y ojos saltones. Glenn Close, Danny DeVito, Natalie Portman, Pierce Brosnan, Annette Bening y Sarah Jessica Parker, acompañan a Nicholson en este presidente memorable, en una película para disfrutar una y otra vez.

Julia Louis Dreyfus: Veep

A pesar de un círculo de personas que la detesta, Selina Meyer se encarga de llegar a la presidencia haciendo de la política un espectáculo humorístico. La mujer del grupo no es otra que Julia Louis-Dreyfus que hace un trabajo impecable y totalmente adorable para los que aman el humor negro. No por nada se ganó todos los premios Emmy en la categoría de Mejor Actriz de Comedia.

Martin Sheen: The West Wing

Con siete temporadas, hay quienes aún la consideran su serie política favorita. Estuvo al aire hasta 2006 donde mostró el mandato del presidente demócrata Josiah Barlet, interpretado por Martin Sheen junto a su grupo de asesores. Una encuesta realizada por el medio especializado Variety dio como resultado que el 52,32% de los encuestados le gustaría como presidente a Barlet para ser electo en la realidad. Y es que tenía dos características que lo hacían adorable: su actitud diplomática y su carácter tan paternal frente a las complicadas situaciones que como el líder de la nación debía enfrentar.