Cuarenta y tres años. Unos 20 pasándome la plancha o haciéndome ondas al agua. Tuve al menos quince decoloraciones. Mi pelo natural es rubio ceniza -actualmente rubio cuarentena- pero en mi adolescencia quise ser morocha, hace un par de años se me dio por volverme colorina y también pasé por el famoso pink hair don’t care. ¿Cuál era la probabilidad de resistirme a probar la nueva línea regeneración extrema de Dove? Ninguna.

Hay factores ambientales y también de la vida cotidiana que inciden en la salud capilar. La calefacción, la polución, el cloro, el agua salada, el sol y la humedad son algunos de los factores que lo castigan. Pero a esto tenemos que sumar lo que casi todas usamos, que son las típicas herramientas de calor (secador, plancha, buclera) y las coloraciones o decoloraciones frecuentes. Un combo absolutamente normal que sin darnos cuenta va dañando la fibra capilar y debilitando la salud del pelo, haciendo que se vea poroso, y sin brillo.

La nueva línea Regeneración Extrema de Dove está precisamente formulada para reparar este tipo de pelo y estrena un nuevo factor de nutrición 80, recomendado para cabellos extremadamente dañados o que hayan sufrido corte químico (alisado, mechas, iluminación, o errores en la aplicación de productos).