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Madre hay una sola y padres por montones, dicen. Y aunque no vamos a ponernos a escudriñar acerca de la verdad de este lugar común, lo cierto es que en el cine tanto madres como padres hay de todo tipo y gustos. Desde Gregory Peck en Matar a un Ruiseñor, pasando por Sean Connery en Indiana Jones o un padre como Hugo Weaving en Priscilla, La Reina del Desierto, hasta Mufasa, el malogrado padre de Simba en El Rey León. Podríamos estar infinitamente enumerando progenitores célebres en la gran pantalla. Y con la excusa de celebrarlos a ellos, que nos motivan, nos enseñan y apañan desde tiempos inmemoriales, nos hemos dado la difícil tarea de seleccionar los que pensamos que son los 10 padres más emblemáticos del séptimo arte. Y es que esto de las listas nunca ha sido algo fácil porque nunca se deja a nadie contento, pero la gracia también está en esta imparcialidad. Estos son los nuestros. Juegue usted con los que faltan. ¡Feliz Día Papá!
El Padrino (1972)
Según la miniserie The Offer que actualmente se da por Paramount Plus y que cuenta el tras bambalinas de la filmación de El Padrino, el motivo principal de esta historia es la familia. “La famiglia”, dicho con el acento de Vito Corleone, el padre de esta tribu que es un enjambre de crimen, lealtades y traiciones a partir de esta dinastía que tiene como pilares a los personajes de Marlon Brando, Al Pacino y Robert de Niro. Si esto no va sobre lo paternal, no sabemos qué puede ser.
Star Wars (1977)
“Yo soy tu padre”, la frase procedente del Episodio V de la saga: El Imperio Contraataca, dicho por el más malo de los malos, Darth Vader dirigiéndose a nuestro héroe Luke Skywalker y que fue elegida por el portal web Lovefilm como la frase más memorable sobre la historia del cine. El padre intergaláctico más famosa de la cultura pop, sin lugar a dudas.
Kramer vs. Kramer (1979)
La ordenada vida de un ejecutivo, que fue abandonado por su mujer y la de su hijo, cambian drásticamente cuando la esposa regresa después de un tiempo exigiendo la custodia de su hijo. Dustin Hoffman luchando contra viento y Meryl Streep por mantener a su pequeño niño a su lado, marcó su carrera y a toda una generación. Padre emblemático.
El Resplandor (1980)
Padres hay de todo tipo. Ya lo advertimos al comienzo. Y este padre es del terror. Uno que lleva a su esposa y a su pequeño niño a una suerte de refugio en las montañas, porque este hombre de familia tiene que terminar su nueva novela. Y en este retiro literario comienzan las alucinaciones, los terrores, los fantasmas -tanto reales como imaginarios- a causa de este encierro voluntario de sus personajes. Jack Nicholson está aterradoramente genial.
En el Nombre del Padre (1993)
En pleno conflicto de la IRA, esta película está basada en la historia real de Gerry Conlon, un irlandés que fue encarcelado injustamente por un atentado en Londres. Película clave para Daniel Day Lewis, que lo hace merecedor del premio al Mejor Actor en el Oscar de ese año. Y aunque el padre del título no se refiere a él, todo es a nombre de Daniel.
La Vida es Bella (1997)
En una lista como esta, no puede estar ausente uno de los padres más icónicos de la historia del cine moderno. El italiano Roberto Benigni que se hizo del Oscar a la película extranjera, anunciado por Sophia Loren ni más ni menos, y que cuenta la historia de cómo un padre intenta proteger a su hijo pequeño de los horrores del campo de concentración nazi en Auschwitz, merece todos los reconocimientos, por enternecernos y conmovernos hasta lo más profundo.
Los Excéntricos Tenenbaums (2001)
El padre castrador y manipulador de Gene Hackman en este filme inolvidable del grandísimo Wes Anderson tenía que estar en esta lista. Todos los traumas y las amarguras de sus hijos personificados por Ben Stiller, Gwyneth Paltrow y Owen Wilson tienen un motivo y un nombre: Royal Tenenbaum. Nadie dijo que existía el padre ideal.
Big Fish (2003)
Si hablamos de padres en el cine, el de Big Fish aparece automáticamente. Y acá estamos ante otro padre que miente y que crea fantasías a sus hijos para protegerlos. Y tenemos a Billy Crudrup que es William, que regresa al hogar para estar con su padre, Albert Finney, con quien no tiene muy buena relación pero que tiene una enfermedad terminal. Es por esta razón que se ve obligado a escucharlo mientras cuenta sus interminables e increíbles historias de juventud. Un clásico. Y lo último bueno que hizo Tim Burton, dicho sea de paso.
Captain Fantastic (2016)
Ben y su esposa Leslie llevan años criando a sus seis hijos en los bosques de Washington, sin tecnología ni con las comodidades propias del mundo moderno. Lo han decidido así. Cuando ella muere, Ben decide llevarlos de vuelta a la civilización, pero el contraste entre estos dos mundos y la adaptación será duro para todos. El padre hippie es Viggo Mortensen, en este filme distinto, iluminador y que deja más de una reflexión, sobre cómo ser rígido y extremo, tanto de un lado como de otro, puede ser igual de complejo.
El Padre (2020)
La película que le otorgó un nuevo Oscar a Mejor Actor al gran Anthony Hopkins y donde se hace acompañar por otra grande como Olivia Colman, es originalmente una obra de teatro. Y narrativamente sorprende a todos quienes la ven. El Padre habla del envejecimiento, de la memoria, de la soledad, de los afectos, de lo que pasa en la propia mente versus lo que sucede en la realidad. Revelador, doloroso, necesario.
