Revista Velvet | La revancha de Modric: Le dijeron que no tenía físico y asesinaron a su abuelo el mismo día de la final del mundial
Tendencias

La revancha de Modric: Le dijeron que no tenía físico y asesinaron a su abuelo el mismo día de la final del mundial

La revancha de Modric: Le dijeron que no tenía físico y asesinaron a su abuelo el mismo día de la final del mundial
Tendencias

La revancha de Modric: Le dijeron que no tenía físico y asesinaron a su abuelo el mismo día de la final del mundial

POR Sole Hott | 13 diciembre 2022

Este martes Croacia y Argentina se enfrentan en semifinales de Qatar 2022. Ambos países buscan su pase a la final y Luka Modric su merecida revancha.

El centrocampista del Real Madrid, nacido en Croacia en 1985, juega su último Mundial de Fútbol. En Rusia 2018 llegó a la final, pero no pudieron contra la escuadra francesa. Es la segunda vez que Luka Modric lidera a su equipo en semifinales, pero este año la final guarda un toque especial, así como como el golpe más duro de su vida.

La vida de este futbolista, así como la de muchos croatas, está marcada por la guerra de independencia en su país, la que tuvo lugar entre 1991 y 1995. Luka asegura en el documental “Capitanes” de Netflix, que tuvo una infancia tranquila hasta que los ataques, bombas y la muerte irrumpieron en su vida. “Es lo que más me quedó de mi infancia. Aunque no me gusta hablar de eso”, explica durante la entrevista. “Tuvimos que escapar de nuestra casa y buscar refugio en hoteles”, lugar donde vivieron alrededor de 6 años y donde comenzaría su pasión por el fútbol. “El fútbol era una forma de salir de eso. De lo que pasaba a nuestro alrededor”, confiesa en el documental.

“Al ser chico no te das cuenta de por qué suceden estas cosas. No eres consciente de todo lo que ocurre a tu alrededor si tus padres tratan de protegerte. Ves que algo está pasando cuando ellos están preocupados, pero no lo entiendes. Lo piensas un momento, pero quieres jugar y estar con tus amigos“, comenta en su autobiografía.

Luka tenía 5 años cuando comenzó la guerra por la independencia croata de la disuelta Yugoslavia. Vivía con sus padres y pasaba mucho tiempos con sus abuelos paternos. Luego de casi 5 años de guerra, Croacia logró su objetivo, pero las secuelas para los sobrevivientes fueron abismales. Destrozos, pobreza, desalojo, crisis económica y, por supuesto, muchas muerte. Esta última, la peor de tods y la que marcó al pequeño Luka para siempre. Las batallas duraron incluso hasta 2001.

Su abuelo fue asesinado un 18 de diciembre de 1991. Salió un día de casa y no regresó, lo encontraron muerto horas después. Según testigos, Luka (tenía el mismo nombre de su nieta) iba de regreso a casa con agua y comida cuando fue atacada por guerrilleros serbios. Le dispararon a solo cuadras de su casa, donde vivía junto a su nieto. Stipe, el papá del centrocampista, lo encontró muerto horas después junto a otros seis hombres. Tras el hecho, dejó su trabajo y su casa y se mudaron a Zadar. Y al poco tiempo, su casa fue incendiada. En el documental de Netflix, el capitán de la selección croata muestra lo que quedó de su hogar.

Es más, cuando tenía 10 años, y debido a un trabajo escolar, Luka escribió sobre lo que sentía en en ese momento, 1995. Más de 20 años después, en 2018, una profesora que guardó aquel tesoro escolar lo compartió. “Aunque aún soy pequeño he pasado mucho miedo en mi vida. El miedo a la guerra y a los bombardeos es algo que estoy superando poco a poco. El suceso y la sensación de pavor que nunca olvidaré ocurrió hace cuatro años, cuando los chetniks mataron a mi abuelo. Yo lo quería mucho. Todos lloraban, y yo no podía entender que mi querido abuelo ya no iba a volver”.

“La guerra me marcó para toda la vida. Formó mi carácter, aprendí a luchar, a ser humilde y a tener los pies en la tierra. Tengo el recuerdo de pasar mucho tiempo con mi abuelo, sobre todo cuando mis padres trabajaban. Lo recuerdo cada vez que gano algo. Ojalá pudiera ver lo que he logrado”, reveló en otra oportunidad.

Parte de esta historia la cuenta el mismo Luka en su autobiografía “Mi juego”, lanzada en 2019.  Este 18 de diciembre se cumplen 31 años de su homicidio. Y de ganar el partido contra Argentina, ese mismo día, podría estar disputando la final de la Copa del Mundo.

Su camino hacia el Balón de Oro

Debido a la guerra dejaron su casa para refugiarse en un hotel de Zadar. Los empleados del lugar lo vieron jugar fútbol y se comunicaron con el director deportivo del NK Zadar. Su madre se dedicaba a la costura y su papá empezó a trabajar como mecánico en el ejército croata.

En 1995 la guerra terminó y el pequeño era conocido como “El Cruyff de los Balcanes”. Y aún cuando la vida lo volvió a golpear, él sabía lo que valía. “La mayoría me decía que no tenía la anatomía para ser futbolista. Igualmente, nunca lograron desmoralizarme”.

Las críticas se mantuvieron hasta que Luka se volvió uno de los mejores del mundo. “El jugador más difícil de encontrar es ‘el Modric’. El que defiende como un 6 y ataca como un 10. Trabaja en la contención, se hace volante ofensivo y extremo”, dijo Marcelo Bielsa sobre el crack del Real Madrid.

Por su fuera poco, Luka Modric fue el primer jugador, fuera de Lionel Messi y Cristiano Ronaldo, en llevarse el Balón de Oro en la última década. En el año 2018 rompió la racha y se quedó con el galardón entregado anualmente por France Football. 

“La guerra me hizo más fuerte. No quiero llevarlo conmigo para siempre, pero tampoco quiero olvidarlo”. ¿Será tiempo de su revancha?

 

 

Te puede interesar