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Este fin de semana, Katy Perry realizó su último concierto, parte de su residencia en Las Vegas. Y tuvo una invitada estrella: su hija con Orlando Bloom, Daisy Dove, de 3 años, quien hizo su primera aparición en público.
Mientras Perry, de 39 años, se preparaba para interpretar su sencillo Hot n Cold, hizo una pausa y se tomó un momento para hablarle a la pequeña, quien apareció en pantalla durante un segmento de la actuación.
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“¡Daisy! Te quiero tanto”, dijo Perry. El momento, fue capturado por los fanáticos de la cantante, quienes viralizaron el momento a través de redes sociales. “Eres mi mejor amiga, estoy tan contenta de que estés aquí”.
“Voy a cantar la siguiente canción, creo que ya te la sabes…”, continuó la orgullosa mamá, dirigiéndose directamente a su hija, que estaba vestida con un disfraz de Minnie Mouse entre el público.
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En un vídeo compartido también en X por un miembro del público, la cantante rindió homenaje a Bloom, con quien se comprometió en 2019, por ser “un increíble sistema de apoyo” y “un padre increíble”.
Perry dirigió entonces su atención a la pequeña: “Creé este espectáculo tras el nacimiento de mi hija, Daisy Dove. Cuando la conocí, fue como si todo el amor que siempre había buscado apareciera por fin“.
“Me hizo completa, me curó y me enseñó a jugar de nuevo”, continuó. “Así que este espectáculo es para el niño interior de todos. Y para la esperanza de que quizá si todos pudiéramos ver la vida a través de los ojos de un niño, seríamos libres”.
En el concierto, no solo asistieron Daisy y Orlando, sino también Meghan Markle, el príncipe Harry y Céline Dion. Esto, después de que hace tan solo unos días los Sussex fueran vistos pidiendo dulces con sus hijos en Halloween, en California.
