El Festival de Viña 2025 llegó a su fin, pero las declaraciones de sus protagonistas siguen dando de qué hablar. Durante el cierre del certamen, Jorge López, fue consultado en televisión abierta sobre su situación sentimental, y su respuesta no dejó indiferente a nadie.
“Estoy de un lado para el otro, no tengo ningún contrato firmado amorosamente, porque no me gusta el amor romántico, el amor estamental, lo que nos han enseñado como figura para amar”, expresó López.
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Pero la conversación no terminó ahí. Cuando le preguntaron si creía en el matrimonio, su postura fue igual de contundente: “No creo en el sentido de pertenencia, en la posesión. Yo ya he firmado contratos laborales, no quiero un contrato más en mi vida, quiero pasármelo bien“.
Sus palabras abren el debate sobre qué significa realmente el amor romántico y por qué algunas personas no encajan en los esquemas convencionales del romance. ¿Es posible amar sin caer en los paradigmas establecidos?
Cuando hablamos de amor romántico, solemos referirnos a la idea tradicional de una relación basada en la exclusividad, la idealización de la pareja y la creencia de que el amor todo lo puede.
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Este concepto ha sido reforzado por la literatura, el cine y la sociedad durante siglos, pero en la actualidad, muchas personas cuestionan si realmente es un modelo sano o si impone expectativas poco realistas.
El amor romántico en sí mismo no es negativo, pero puede volverse problemático cuando genera dependencia emocional, expectativas inalcanzables o la idea de que una pareja debe “completarnos”.
Expertos en psicología advierten que la clave para una relación saludable está en el equilibrio. Es válido sentir amor profundo por alguien, pero sin perder la individualidad ni caer en dinámicas posesivas o poco funcionales.
El rechazo al amor romántico convencional puede deberse a varias razones:
Si sientes que las relaciones convencionales te resultan sofocantes, que la idea de compromiso formal te genera ansiedad o que disfrutas más de relaciones libres de etiquetas, podrías estar alineado con una visión menos tradicional del amor. Lo importante es identificar qué tipo de relación te hace sentir cómodo y ser honesto contigo mismo y con tu pareja.
