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Actors on Actors es un especial que año a año el medio especializado en la industria de Hollywood publica con los nombres más rutilantes de la temporada. Entre ellos, este año, está Pedro Pascal, Claire Danes y Kieran Culkin. Pero en esta oportunidad hablaremos de un talento joven que primero con Scream y luego con la serie Wednesday, aparece en todas partes.
Jenna Ortega fue confrontada con Elle Fanning, protagonista de la serie de comedia The Great, y en una conversación/interrogatorio cruzado, hablaron de temas como las presiones en la industria y lo que cuesta priorizar la salud mental.
Moviéndose en esos ejes, es que Jenna Ortega se emocionó al hablar de las presiones que siente frente a las redes sociales, llegando incluso a llorar mientras hablaban del tema. Jenna se refirió a la explosión de comentarios virtuales que ocasionó el lanzamiento de Wednesday, la serie reboot de Los Locos Addams en Netflix. Y de cuánta importancia le dan los ejecutivos al impacto que tienes en las redes. “Podías ir a una audición o reunión, y te preguntaban ¿Cuántos seguidores tienes?”.
“Incluso después de filmar Wednesday, cuando estaba haciendo otros castings, se acercaban a mi equipo y le decían: Nos gusta, pero no sabemos si tiene suficiente nombre. Y las redes sociales, lo que le hacen a cualquier persona de nuestra edad, es un juego de comparación. Es muy manipulador”.
Además, la actriz reconoció que después de su éxito con esta serie se siente “muy nerviosa por publicar o incluso decir algo ahí o incluso querer ser yo misma porque siento que…” y Elle Fanning le termina la frase: “se podría malinterpretar“.
“Sí. Debido a que tiendo naturalmente a ser sarcástica o de personalidad más seca, es muy fácil para mí meterme en problemas”, reconoce la actriz. “Me gustaría que las personas pudieran conocer a las personas detrás de la cámara del teléfono móvil y se den cuenta de que nunca se debe poner a las personas en un pedestal”.
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Ortega sigue diciendo: “Y cuando más he estado expuesta al mundo, la gente te ataca y se aprovechan de eso. Ven tu vulnerabilidad y la tuercen de una manera que no siempre esperas”, dice mientras se quiebra y llora. “Es algo tan difícil de equilibrar. Porque, ¿cómo ser honesto sin poner en peligro tu propia salud y seguridad? Es muy fácil sentirse fuera de control”, terminó diciendo la actriz.
