El príncipe George tiene unas preocupaciones algo diferentes que los del resto de niños de su edad. Tal como ha revelado su orgulloso abuelo, el príncipe Carlos, el primogénito de los duques de Cambridge tiene inquietudes medioambientales y tiene profunda conciencia el cambio climático. Antes de la exhibición del documental COP26: In Your Hands, el hijo de Isabel II y aspirante a la corona contó cómo el pequeño está aprendiendo la manera en la que el calentamiento global daña gravemente al planeta: “está aprendiendo cómo el cambio climático está causando las grandes tormentas e inundaciones, las sequías, los incendios y la escasez de alimentos que estamos viendo en todo el mundo”, explicó y continuó un orgulloso abuelo advirtiendo a los jóvenes que su futuro “depende del futuro del planeta”.
Esta preocupación de George es algo que le corre por las venas. Es algo que ha heredado de su padre y su abuelo, grandes defensores de la lucha medioambiental. Antes de la confesión del príncipe Carlos, su propio padre, el duque de Cambridge explicaba a la BBC cómo se dio cuenta de lo que le importaba este tema a su hijo a partir de una experiencia en su colegio, el Thomas Bettersea School, donde realizaron una salida con los niños para que recogieran basura de las calles. Días después, el Duque observó que el pequeño “estaba un poco molesto por el hecho de que un día salieron a recoger basura y, al día siguiente, hicieron la misma ruta, a la misma hora y prácticamente la misma basura que recogieron estaba de vuelta”, explicó. George no podía comprender cómo después de haber limpiado y recogido todos los desperdicios unas horas antes, volvían a estar en el mismo lugar. No lograba entender que todo aquello hubiera podido regresar como por arte de magia.
El nieto de Isabel II explicó como trata de educar a sus hijos para que sean conscientes de la degradación que está sufriendo el planeta y de cómo con pequeños gestos pueden poner un granito de arena para hacer grandes cosas por el medioambiente. “Él es muy consciente, más que los otros dos en este momento. Charlotte es todavía un poco joven. Ella todavía no está muy segura. Y de hecho, Louis disfruta jugando fuera todo el tiempo”. Los pequeños siguen el camino iniciado por sus padres en materia ecológica quienes el pasado domingo presidieron la primera gala de los premios Earthshot, un reconocimiento creado por William donde se reconoce la labor de aquellas personas o entidades que más se preocupan y trabajan por mejorar la calidad medioambiental del planeta, en el que se premiaron las 5 mejores soluciones para luchar contra la crisis climática. Una causa en la que los duques de Cambridge se han involucrado de lleno durante los últimos tiempos y de la que encontrarán de seguro unos dignos sucesores en sus tres hijos: George, Charlotte y Louis.